(He recibido un comentario de unos muchachos que me han hecho algunas preguntas. Este post consiste en dichas preguntas y mis respuestas).
Estimado Joselu:
Somos un
grupo de alumnos de Sociología de 2º de Bachiller, en ocasiones hemos leído con
agrado tu blog. Esta publicación en particular nos ha llamado la atención. La
soledad del auténtico pensador.
¿Haces tuyo ese retrato: las ensoñaciones
del paseante solitario?
Sí, en
bastante buena medida. Me gusta la idea de ensoñaciones de paseante solitario.
No soy una persona de pensamiento ni ideales colectivistas. Tiendo al
escepticismo. Me amedrentan las multitudes deportivas o las manifestaciones de
cualquier tipo en que se reúne la gente para gritar o defender algo. Las
entiendo y está bien que existan, pero yo no estaré en ellas. No las desdeño
tampoco, pero mi lugar no está allí. Me atrae la figura del farero, solo frente
al mar y el cielo, la del paseante por la playa en soledad, la del caminante
solitario.
A Álvaro le parece exagerado igualar
marxismo y dictadura, aparte algunas cosas le parece que están poco matizadas,
poco reflexionadas.
El
marxismo en su libro capital “El manifiesto comunista” (1848) expone la teoría de la dictadura del
proletariado. Y al menos en el partido en que yo estaba (MCE),
de corte estalinista, era un principio necesario dicha dictadura. La democracia
siempre se consideraba burguesa y como un paso para la auténtica revolución. El
marxismo en su estado inicial era la teoría para la toma del poder por una
clase revolucionaria que lo ejercería por un único partido, el de los
trabajadores, el Partido Comunista. Otra cosa es que luego el marxismo haya orientado a partidos democráticos
socialdemócratas como el PSOE y demás. Pero hace más de treinta años que el
PSOE renunció al marxismo.
Y puesto que has dado tu opinión sobre
Podemos, le gustaría que hicieses lo mismo respecto a Ciudadanos.
Creo que
es diferente contemplar a Ciudadanos
desde Cataluña a contemplarlo desde el resto de España. Aquí en Cataluña surgió como forma de dar
salida a un potencial totalmente ignorado que es la población que no se siente
nacionalista o independentista en medio de un tinglado controlado totalmente
por los nacionalistas. Una televisión pública abiertamente sectaria, todas las
organizaciones sociales y políticas subvencionadas por el poder apoyando una
voluntad secesionista y alentando siempre que España es el enemigo y que todo lo malo es culpa de Madrid, sin ser capaz de considerar las
propias carencias. Ciudadanos surgió
de la gente que no se sentía representada por ningún partido y que no se sentía
de derechas. En efecto todos los partidos catalanes comparten ese ADN
nacionalista o son dubitativos como el PSC que se ha quedado en terreno de
nadie por no atreverse a manifestarse como un partido de izquierda contrario al
nacionalismo que desprecia a las regiones menos desarrolladas. Ciudadanos surgió en un momento de
enorme ilusión y yo estuve en los inicios de esta plataforma, luego me alejé
pero en Cataluña no tenemos muchas
opciones si queremos plantar cara al nacionalismo identitario. En el resto de España yo no sé si votaría a Ciudadanos. Las contradicciones son
otras.
Belén se pregunta qué te ha llevado a
plantearte este artículo, añade además que te limitas
a plantear problemas sin proponer ningún tipo de alternativa.
Este post
supone un intento de explicarme, cómo funciona mi modo de pensar, de acercarme
a la realidad. Lo hago desde vértices distintos. No tengo un pensamiento
cerrado, monolítico. Creo que puedo comprender casi cualquier posición, incluso
las más lejanas a las mías. Yo diría que es un pensamiento cuántico en que los
contrarios pueden ser simultáneamente ciertos. Es un azar que yo esté en un
lado y no en otro. Depende de tantas circunstancias inexplicables... En cuanto
a no proponer alternativas, es un modo de plantear el blog. Pretendo dejar las
entradas lo más abiertas posibles para que puedan ser enfocadas desde ángulos
distintos. No pretendo hacer un mitin sino promover un diálogo inteligente a
todos los que quieran participar. Responder a los comentarios me lleva tiempo y
ese tiempo supone que he de pensar nuevamente. Eso me gusta. Me mantiene ágil
mentalmente. No quiero crear doctrina o defender algo inamovible. No. De
ninguna manera. Quiero pensar conjuntamente. Reflexivamente.
Elena piensa que todos tus posts rezuman
melancolía, un monólogo interior al modo de terapia. Esto lo atribuye Ximo -el
profesor- a que quizás te estás haciendo mayor, no como él que nació viejo.
Soy de
naturaleza melancólica, abundan en mí los momentos de tristeza. Supongo que eso
se proyecta sobre el blog. Y sí, son un monólogo interior que es terapéutico.
Quería ser periodista y no pude serlo por diversas circunstancias. El blog me
permite hacer lo que quise hacer desde que tenía once o doce años. Escribir
sobre lo que pasa por mi mente. Me gusta pensar las cosas, mi vida, la
realidad. El hecho de ser melancólico no quiere decir que tenga una percepción
negativa de mi vida ni que sea infeliz. En cierta manera soy muy feliz, pero
tengo un carácter así, tendente a estados azules. No es mejor ni peor. Supongo
que es una combinación genética, química y de la propia historia personal.
Por otro
lado, puede haber melancolía porque en la parte ascendente de mi vida yo era de
naturaleza soñadora, creía con Cortázar
en el poder de la imaginación. Esperaba que la realidad no iba a ser tan
pedestre, tan antiimaginativa como lo ha sido. El mundo no ha sido como lo
imaginé. Han ganado los famas y los cronopios se han hecho funcionarios o
nacionalistas. Hubo un grupo que compuso una canción cuyo título era Malos tiempos para la lírica. Pues eso. Como
dicen “es lo que hay”. Nada que añadir.
Ángela coincide con tu opinión. Ángela se
pregunta cómo se tomaban tus alumnos esas actividades entonces y qué actitud
tienen los actuales: ¿observas diferencias?
Claro que
hay diferencias. Enormes. Antes yo hablaba un lenguaje que llegaba a los
jóvenes de aquel tiempo (hace veinte o veinticinco años, tal vez quince) y
luego advertí con gran impotencia y pesar que ya no lograba conectar con las
nuevas generaciones. Supongo que el papel de uno va pasando. En un momento
estás en la cresta de la ola y en otro te has quedado desfasado. Ahora no
pretendo ya ser ningún referente. No lo necesitan y yo no podría serlo. Todo ha
cambiado. Mi cosmovisión solo se expresa en el blog. Me temo que soy demasiado
intelectivo para estos muchachos que necesitan cosas más cercanas. En todo
caso, el papel de un profesor es como trazar círculos en la arena de la playa. Llega la ola y se lo lleva. Así es la
vida. No aspiro a perdurar de ninguna manera. Supongo que me he hecho conservador. También he sido padre y eso cambia
mucho la perspectiva. Hoy hablaba con mi hija de quince años y le decía que la
política es importante, que yo siempre la he tenido en mente. Pero la política
en Cataluña para las inquietudes de los jóvenes es de signo independentista y este ha asumido el monopolio de la rebelión generacional.
Un
saludo.
De
Segundo Bachiller B. Sociología.