Hoy es el solsticio de invierno. He salido a hacer unas fotos para recibirlo. No me gustan las fotos redondas ni perfectas, una buena foto tiene siempre algo de imperfección que la redime de esa tentación que es conseguir una foto espectacular y redonda. Lo perfecto me aburre. Hay en Instagram fotos de ese tipo que intimidan por su puesta apoteósica en escena. Prefiero el latido frágil de la vida, ese que es un simple corazón en una fachada, o dos palomas que se miran, o una pintada que nos recuerda que estamos viviendo una "paranoia colectiva" o unas sombras inciertas o unas hojas marchitas.
Puede que el mundo solo tenga la realidad de ser un reflejo en nuestra consciencia. Me gusta esta idea como fotógrafo que sale a buscar dicho reflejo. Todos somos un reflejo en la consciencia de los demás, existimos subjetivamente, por nuestra percepción y por la de los demás. Fuera de eso no existimos.
La consciencia es el mayor misterio que existe.
Por eso como hacedor de algunas fotografías busco esa consciencia en pequeños detalles que me alertan de nuestra impermanencia.
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Lo importante es el amor en la mirada hacia lo que se quiere fotografiar, dejándolo en suspenso toda una eternidad. Atrapar instantes es más interesante que hacer fotografías.
ResponderEliminarHace unos días acudí a exposición de un concurso de fotos de una escuela de Arte. Todo eran poses, fotos preparadas, modelos, arte academicista. Lo que me transmitió era algo sin vida, demasiado prefabricado. Cuando hago una foto, antes me enamoro de la imagen. Felicidades por tu sensibilidad y tu mirada.
Ciertamente hay un tipo de fotografía tan prefabricado, tan sofisticado que me echa para atrás, como tú, pienso que carece de ese latido íntimo que debe contener la buena fotografía. Hay un libro espléndido que se titula Curso de fotografía para jovenes fotógrafos de Eduardo Momeñe que no me canso de regalar ni de recomendar. En él se nos alerta de las fotos bonitas, esas que tanto gustan.
EliminarMe gustan las fotos en blanco y negro, eso de entrada. Las prefiero a las de color.
ResponderEliminarMís recuerdos son en blanco y negro, y las fotos de mi niñez, las de blanco y negro, pertenecen a mís recuerdos. Quizá por eso, y por poco nítidas, no he dicho borrosas, me gustan estas fotos. Un corazón mal dibujado, como debe de ser, junto al curruco de dos palomas adornan una frase de estilo anarco. La vida de barrio. La de todos los barrios que se precien de llamarse tal.
Comulgo contigo en la definición de la consciencia, el misterio del ser, que diría Gabriel Marcel.
Salut
Ayer cuando hacía la foto del corazón junto a la ventana, me llegó el grito airado de un hombre que estaba sentado en un bar preguntando que por qué fotografiaba su ventana, que era su casa. Yo le dije que lo que fotografiaba era un corazón de la ventana más bonita de Cornellà, y él se quedó patidifuso. Hacer fotografías sigue siendo peligroso, pero es un ejercicio meditativo en que el fotógrafo siente pálpitos cuando descubre algo inmaterial que pugna por salir.
EliminarSí, es la vida de barrio, imperfecta y llena de vida.
Me alegro de coincidir contigo en la consideración del misterio del ser, en un tiempo que no se le presta la atención debida porque está la gente en las redes sociales, en los centros comerciales y en las series. Pero tarde o temprano se volverá la mirada hacia la consciencia.
Salut
Lo que importa es la mirada del autor, transmitida por un medio que en este caso es la fotografía, sin juegos ni artificios. A mí tampoco me gustan las fotos retocadas.
ResponderEliminarUn saludo.
Bueno, pienso que cualquier fotógrafo concede un espacio a la edición de las fotografías mejorando la iluminación, el contraste, el color... Eso es legítimo y no resta valor a la foto, incluso puede hacer que sea más intensa en su intención. Forma parte del arte fotográfico incluso cuando se revelaba manualmente en laboratorios caseros. Y en cierto sentido, la fotografía es un juego y un artificio. Lo que desde mi punto de vista, un exceso de sofisticación y puesta en escena de fotos archiperfectas, por asombrosas que puedan ser -y lo son- no incluye que eso conlleve que tengan fuerza expresiva y alma. Me asombran más fotos imperfectas, no jarrones de lujo carísimos y bellísimos, fruto de complicados cálculos y simulaciones. Prefiero una cierta espontaneidad y naturalidad. Un saludo, Alfred y muchas, muchísimas gracias por pasarte por aquí.
EliminarEl concepto "retoque" demasiadas veces se usa desde la ignorancia y demasiadas veces también, es una opinión o argumento simplemente repetido en modo ave Psittacoidea.
EliminarHay que entender que desde los principios de la Fotografía, se vienen "retocando" las imágenes. Dicho de otro modo, siempre se han manipulado las imágenes, generalmente (aunque no siempre) para mejorarlas.
Los que hemos tenido la oportunidad (ya casi se puede decir fortuna) de practicar la fotografía química (no me gusta la palabra analógica), sabemos que ya no solo la forma de iluminación, sino que incluso el método de revelado, el tipo de película empleado y la forma en que se copia un negativo sobre papel, el enmascarado de zonas, etc.etc. son forma de manipulación. No hablemos ya de la fotografía química en color y con películas reversibles. Creo que algunos se sorprenderían y mucho de ver que antes del archi-mencionado Photoshop, ya se "postproducían" las imágenes.
En fin... es un tema cansino.
Otra vez, demasiadas veces, se confunde la edición interpretativa, con el retoque.
Hay una cosa que existe, muy a pesar de la ignorancia atrevida, que se llama Impresionismo fotográfico, aunque algunos quieran entenderlo como "juegos y artificios"
No sé si ya lo había hecho (si es así, disculpa) pero te invito a ver mi "otro blog" RicardPardo.com donde encontrarás en la cabecera unas galerías destacadas (son cortas)
He entrado en la página que me referencias y he leído algunos de los artículos. Me ha interesado el de instagram en especial. Tengo una visión muy positiva de esta red como soporte de buena fotografía. Si uno busca temáticamente, muchos y buenos fotógrafos cuelgan sus fotos en la red. Casi se podría decir que para ser algo actualmente hay que estar allí. Está todo lo banal y tonto, a la vez que excelentes creaciones. Es una red joven y eso la hace apasionante en su tontería o en su genialidad. El mundo de los blogs es viejo, no es un lenguaje de los jóvenes, pero el mundo de instagram es radicalmente joven. Es bueno observarlo. Me ha gustado esta página que me has enlazado y volveré a leer más artículos fotográficos.
EliminarGracias Joselu. En mi opinión esa plataforma sólo tiene un problema: su dueño.
EliminarTus fotografías nos hablan de la historia de tu barrio y me parece fascinante ver un instante de un día cualquiera capturado por la cámara.
ResponderEliminarEl solsticio un año más pone freno a esa oscuridad creciente a la que tanto cuesta acostumbrarse. Y para celebrarlo, cualquier día bien temprano saldré a fotografiar esa consciencia de la que hablas y que habita en todos los rincones, tus reportajes me animan a hacerlo.
Es un placer ver con tus ojos esa realidad que por ser cotidiana a menudo nos pasa desapercibida.
¡Saludos y un gran abrazo!
La cámara y el ojo forman un combinado muy potente. En realidad no hace falta nada espectacular para una fotografía interesante: es nuestra forma de mirar la realidad la que descubre aspectos sorprendentes en ella -una sombra, un reflejo, un pequeño detalle, una composición adecuada...-. Me alegrará que salgas con tu cámara a recorrer tu barrio. Mis fotos -has visto- son detalles y no grandes perspectivas... El otoño y el invierno dan lugar a fotos interesantes -más si nevara, ¡qué maravilla!-. Espero ese reportaje.
Eliminar¡Un fuerte abrazo!
Buenas imágenes capturadas.
ResponderEliminarFelices navidades, Alexander, que sean días alegres y animados en compañía de tus series preferidas.
EliminarTe he visto en el blog de Miquel, después de tantos meses sin publicar y la verdad será que este año una se ha vuelto más sensible no sabes la alegría que me ha dado saber que has vuelto a pubñicar después de meses sin aparecer.
ResponderEliminarMe he tirado un año sin aparecer, pero por problemas y ausencias y en estas fechas se notan más.
Feliz Navidad
Bienvenida, Bertha, esto de publicar es como el Guadiana, y a veces pasan largas temporadas en que se está inactivo Feliz Navidad, también para ti.
EliminarESTOY CONTIGO NOME GUSTAN LOS PERFECTOS A VECES EN UN MAL GIRO ESTA LO HERMOSO...
ResponderEliminarEs cierto que lo que está excesivamente acabado y perfecto puede satisfacer menos que lo insinuado o perfilado. No me gustan los dioses de la fotografía. Hay grandes fotógrafos cuya obra es inexacta, humana, frágil.
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