YO: Horacio, bienvenido a este espacio en plena decadencia y declive. Tú eres un alter ego que descubrí en un viaje hace veintinueve años en el Portugal de Pessoa. ¿Puedes decirme por qué este blog tiene cada vez menos visitas?
HORACIO: Tu ingenuidad me abruma, amigo Joselu. Has ideado un blog a golpe de citas y de improvisaciones que no interesan a nadie. ¿A quién puede atraerle que oyeras un ruiseñor de madrugada? ¿A quién puede interesarle la amargura? Es un sentimiento que no vende. Además, cada vez eres más inactual. No hablas del momento en que estamos, has perdido el norte. Asimismo, tu idea de suprimir los comentarios es nefasta. Muchos visitantes, como haces tú, leen los comentarios antes que el propio post. Son lo más valioso de un blog. Un blog sin comentarios es abiertamente presuntuoso. Eso lo pueden hacer algunos gurús del mundo bloguero, pero no tú en estos momentos.
YO: He querido construir un espacio que de modo referencial fuera levantando un personaje que fuera interesante para los lectores. Ciertamente que no escribo versos en los cubos de basura como Neorrabioso, ni me travisto como él, ni publico aforismos feministas y que denuncien el patriotismo. Me faltan elementos exóticos que hagan de este espacio algo por lo menos cínico.
HORACIO: Pienso que eres un coñazo que buscas asuntos como la autoconciencia y la trascendencia. Todo muy etéreo y pesado. Te falta mordiente que te sirva para morder con gracia al lector. A los lectores les gusta que les muerdan y no que les den jabón. Es preferible un blog intempestivo e incordiante que un blog bienintencionado que no aporta nada. Yo desde luego no te leo.
YO: Eres un hijo de tal, te he traído aquí para que me promociones, no para que me hundas. Además, te equivocas porque el asunto del ruiseñor nocturno tras una dosis de sexo salvaje tuvo su qué…
HORACIO: Lo del sexo nocturno no lo habías contado…
YO: Hay tantas cosas que quedan entrelíneas…, pedazo de mandril en celo. Creo que no te volveré a traer a mi blog por más alter ego que seas mío.
HORACIO: La dualidad es la base… de muchos acontecimientos afortunados, pero tú, Joselu, eres tan insípido como una sopa Minestrone de Gallina Blanca.
YO: Vete a tomar viento fresco.
HORACIO: Y no hemos celebrado el día de la mujer.
YO: ¿Te has vuelto feminista?
HORACIO: Por prudencia, lo soy, claro que sí.
YO: Terminemos esta noche, nuestros lectores seguro que lo agradecerán.
HORACIO: Lo que creo es que les hubiera gustado que te siguiera dando por culo, pedazo de petulante sin sentido.
YO: Te odio.