Este año, estimulado por Antonio en su blog Repaso de Lengua, me he planteado cambiar de métodos para promover la lectura entre mis desganados –las más de las veces- alumnos. He de decir que mi compañero ha realizado una serie admirable de posts sobre el tema del fomento de la lectura, que han actuado como acicate entre otros blogueros que Lu recoge en una antología también con su acierto habitual.
Recupero un sistema que en el antiguo BUP me dio buenos resultados. Ignoro si funcionará en la ESO con alumnos no analógicos y sí totalmente digitales.
Me planteo crear una “biblioteca viva” en la clase. Cada alumno comprará un libro diferente –orientados por mí-. He recopilado unos cuarenta o cincuenta títulos de literatura eficaz para atraerlos a la lectura. Digo “eficaz” pero no sé si me equivocaré. Los títulos que les ofreceré son potentes dentro de un variado registro de géneros y temas. Habrá literatura de horror, policiaca negra, ciencia ficción (géneros de los que soy amante), fantástica, realista, una sección de narraciones “sorprendentes”, libros de teatro (es todo un género y ha habido años en que he dedicado todo el curso a la literatura dramática), libros para pensar, cómics, y, por último, un grupo de novelas dedicadas a los “superlectores”.
Quiero implicarles en el desafío de enfrentarse a la literatura amena y adulta a la vez-. Quiero que aprueben ellos el plan de desarrollar un curso fuera de los esquemas habituales, y les pediré su compromiso por escrito.
Cada alumno partirá de una cuenta con tres puntos iniciales. Cada libro leído (con la ficha cumplimentada en la que la opinión personal será fundamental) subirá un punto la nota. Los libros de los superlectores subirán tres puntos la calificación.
Paralelamente llevarán una libreta de lectura en la que anotarán sus impresiones, reflexiones y comentarios que les servirán para luego elaborar la opinión personal. Dicha libreta contará un punto correctamente realizada.
Un día a la semana lo dedicaremos íntegro en clase a la lectura silenciosa y al trabajo sobre las fichas.
La idea es que los libros les gusten y se los intercambien entre ellos. El alumno que lea tres libros tendrá bonificación de un punto –añadida a los tres puntos que habría conseguido-; el que lea cinco, tiene el sobresaliente en sus manos. Quiero que sus mismas opiniones sirvan como caja de resonancia para animarles a leer, a extender el virus literario.
Habrá libros dinámicos con una historia llena de fueza narrativa y libros “bomba” para hacerles reflexionar, aunque no sé si esto será lo que más les atraiga. Ignoro si habrá algún alumno que escoja algún libro para “pensar”.
El segundo día de la semana lo dedicaremos -en el primer trimestre- a desgranar –siguiendo el libro de texto- una historia de la literatura española. El tercer día de clase nos centraremos en el blog didáctico que crearé, y en el que se podrán seguir sus opiniones lectoras.
En el segundo trimestre quiero añadir al intercambio de libros la realización de una novela escrita por ellos de unas quince o veinte páginas. En el tercer trimestre nos centraremos en morfología y sintaxis como preparación del bachillerato.
El riesgo asumido es importante, pero merece la pena. Estos días siento en mí esa sensación de caminar al filo del abismo. Todo puede irse al traste según el grupo humano y los alumnos conflictivos que formen parte de él. Pienso que son dos cuartos de ESO y que su desarrollo emocional es mayor. En eso se basa mi tesis mantenida en este blog hace unos días y que fue, para mi alegría, animadamente comentada por amables lectores.
Creo que el sistema, basado en que cada uno puede construir su propia nota, les puede atraer. El resto lo han de lograr las lecturas meditadas por mí pero no exentas de objeciones. Muchas veces me he equivocado en los libros que he recomendado. Estamos pues al pairo y habremos –con habilidad e ingenio- de capear el temporal de posibles desaguisados que hayan de venir.
Recupero un sistema que en el antiguo BUP me dio buenos resultados. Ignoro si funcionará en la ESO con alumnos no analógicos y sí totalmente digitales.
Me planteo crear una “biblioteca viva” en la clase. Cada alumno comprará un libro diferente –orientados por mí-. He recopilado unos cuarenta o cincuenta títulos de literatura eficaz para atraerlos a la lectura. Digo “eficaz” pero no sé si me equivocaré. Los títulos que les ofreceré son potentes dentro de un variado registro de géneros y temas. Habrá literatura de horror, policiaca negra, ciencia ficción (géneros de los que soy amante), fantástica, realista, una sección de narraciones “sorprendentes”, libros de teatro (es todo un género y ha habido años en que he dedicado todo el curso a la literatura dramática), libros para pensar, cómics, y, por último, un grupo de novelas dedicadas a los “superlectores”.
Quiero implicarles en el desafío de enfrentarse a la literatura amena y adulta a la vez-. Quiero que aprueben ellos el plan de desarrollar un curso fuera de los esquemas habituales, y les pediré su compromiso por escrito.
Cada alumno partirá de una cuenta con tres puntos iniciales. Cada libro leído (con la ficha cumplimentada en la que la opinión personal será fundamental) subirá un punto la nota. Los libros de los superlectores subirán tres puntos la calificación.
Paralelamente llevarán una libreta de lectura en la que anotarán sus impresiones, reflexiones y comentarios que les servirán para luego elaborar la opinión personal. Dicha libreta contará un punto correctamente realizada.
Un día a la semana lo dedicaremos íntegro en clase a la lectura silenciosa y al trabajo sobre las fichas.
La idea es que los libros les gusten y se los intercambien entre ellos. El alumno que lea tres libros tendrá bonificación de un punto –añadida a los tres puntos que habría conseguido-; el que lea cinco, tiene el sobresaliente en sus manos. Quiero que sus mismas opiniones sirvan como caja de resonancia para animarles a leer, a extender el virus literario.
Habrá libros dinámicos con una historia llena de fueza narrativa y libros “bomba” para hacerles reflexionar, aunque no sé si esto será lo que más les atraiga. Ignoro si habrá algún alumno que escoja algún libro para “pensar”.
El segundo día de la semana lo dedicaremos -en el primer trimestre- a desgranar –siguiendo el libro de texto- una historia de la literatura española. El tercer día de clase nos centraremos en el blog didáctico que crearé, y en el que se podrán seguir sus opiniones lectoras.
En el segundo trimestre quiero añadir al intercambio de libros la realización de una novela escrita por ellos de unas quince o veinte páginas. En el tercer trimestre nos centraremos en morfología y sintaxis como preparación del bachillerato.
El riesgo asumido es importante, pero merece la pena. Estos días siento en mí esa sensación de caminar al filo del abismo. Todo puede irse al traste según el grupo humano y los alumnos conflictivos que formen parte de él. Pienso que son dos cuartos de ESO y que su desarrollo emocional es mayor. En eso se basa mi tesis mantenida en este blog hace unos días y que fue, para mi alegría, animadamente comentada por amables lectores.
Creo que el sistema, basado en que cada uno puede construir su propia nota, les puede atraer. El resto lo han de lograr las lecturas meditadas por mí pero no exentas de objeciones. Muchas veces me he equivocado en los libros que he recomendado. Estamos pues al pairo y habremos –con habilidad e ingenio- de capear el temporal de posibles desaguisados que hayan de venir.
La lista de libros será publicada en este blog cuando esté totalmente elaborada.
¡Adelante JL! Uno de los fallos que más lamento de mis años de educación secundaria es que no se me introdujo entonces a la lectura de literatura, sino simplemente a la memorización de datos sobre movimientos y autores. Qué fabuloso sería si uno o dos de tus estudiantes descubren que les gusta la lectura a través de tu clase. Cuando pongas la lista la tendré en cuenta: yo todavía ando recuperándome de esa deficiencia que arrastro desde entonces.
ResponderEliminarEsto es todo un proyecto multitarea. Tiene una pinta magnífica y creo que podrás sacarlo adelante, si los grupos de 4º trabajan a buen ritmo. Tomo nota de algunas ideas interesantes, como la de la libreta de lecturas. Coincido también en lo de premiar a los lectores con nota. Yo siempre les subo un punto a quienes leen algún libro fuera del 'obligatorio' del trimestre, y los superlectores nunca bajan del notable.
ResponderEliminarEsperamos ansiosos la lista de lecturas y las primeras reacciones.
Ambicioso proyecto. A leer se ha dicho... Y si en esa libreta de lecturas van apuntando palabras nuevas que vayan encontrando mejor. ¿Cuáles son esas palabras? Las que te impiden avanzar en la historia. A mis chavales una vez les puse como ejemplo que el protagonista del libro fuera un "buhonero". Si no sabéis lo que es y no vais al diccionario o se lo preguntais a alguien no vais a entender nada, les decía.
ResponderEliminarYo también quiero ver esa lista. Y me encantará seguiros en el proceso (esté donde esté).
La verdad que es un proyecto precioso, espero que los alumnos colaboren.
ResponderEliminarAparte de leer los libros, ¿por qué no estimular a los más interesados para un 'bookcrossing'?
Que unos a otros se dejen los libros con pequeñas notas comentando lo que han ido encontrando en las lecturas, incluso eligiendo lugares ad hoc para intercambiarlos :
Si son de orientación científica en un laboratorio, si son de misterios en algún sombrío rincón del centro, si muy literarios en un lugar determinado de la biblioteca...
Claro que ya sé que proponer es gratis y no he de hacer yo el esfuerzo, pero puestos a desarrollar algo fantástico como en lo que estás inmerso...
Panta
Saludos.
Es perfecto!! mucho ánimo JL!!!
ResponderEliminarMe parece un proyecto muy goloso. Estamos en plena elaboración del nuestro.Se parece en el tuyo en que cada trimestre incluye una propuesta diferente.
ResponderEliminarCreo que será muy enriquecedor compartir el proceso.
Suerte.
Sin riesgo no hay aventura, educativa en este caso, porque para avanzar es necesario admitir cierta carga de fracaso que lleve a alcanzar los objetivos. Suerte amigo.
ResponderEliminarMuy creativo. Espero que realista. Adaptado a mis circunstacncias voy a realizarlo en mi aula, con los de 4º.A mí me salen siempre con eso de que tienen mucho que estudiar y memorizar e intentan vaguear. Ya te contaré.
ResponderEliminarInteresante sistema. Me sroprende lo del silencio en clase, en la mía no existe y si lo hay me preocupo poruqe algo está pasando y no me entero.
ResponderEliminarEn parte te respondo en el adoquín.
Salud
Venga profesor de secundaria, adelante y mucha suerte, aunque te sientas que vas a caer, el riesgo es quien nos hace más fuertes y, al final, nos hace seguros si creemos en lo que hacemos... y tú crees en lo que haces.
ResponderEliminarEspero que los alumnos respondan bien, porque en realidad, ya te lo dije anteriormente, me hubiera gustado tener un profesor que animará las clases de literatura castellana (y catalana en mi caso) como tú.
Además, creo que empiezas bien, dejando elegir que compren el libro que quieran entre la lista (40 o 50 títulos!!!), porque no hay peor cosa que las lecturas obligatorias. Sin embargo... ¿No corres el peligro que todos, o muchos, compren el mismo libro? Seguro que has pensado en ello.
Bueno, espero ansioso la lista de libros para comenzar mi nuevo curso de literatura. Gracias.
Por cierto, los posts sobre "Descubriendo Marruecos" son de un viaje real que hice. Si te apetece leerlo entero, hay un apartado solo dedicado a ello, clicando en descubriendo marruecos tendrás todas las entradas.
Me parece una iniciativa muy buena! Ojalá algún profesor mío hubiera hecho algo así! Pero no eran ni muy originales, ni muy pacientes en general; también es cosa del colegio en el que estudié.
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