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viernes, 9 de septiembre de 2022

¿God save the King Charles III?

El reciente fallecimiento de la reina Isabel II a los noventa y seis años es ocasión para plantear algunas cuestiones que suscita su figura y su relevancia en la vida británica. Para un español medio es difícil concebir tal fervor del pueblo británico -y no británico- hacia su personaje que encarna a una reina en pleno siglo XXI. Es increíble la adhesión que revela. ¿Cómo es posible que una sociedad tan pragmática como la inglesa tenga en la institución monárquica un eje vertebral de su forma de ser?

 

Todo el mundo ha sabido de la reina por películas tremendamente populares como The Queen dirigida por Stephen Frears e interpretada magníficamente por Helen Mirren, o más recientemente la serie británica The Crown, todavía en proceso de grabación de su última etapa, creación de Peter Morgan y dirigida por varios directores. El cine, la prensa, las revistas, han convertido la monarquía británica en un mundo lleno de glamour pese a los más disparatados escándalos que han suscitado el mundo de los Windsor. Pese a quien pese, la monarquía goza de buena salud en el imaginario popular, y la reina era muy querida por su pueblo para el que era una especie de icono histórico con toques de pop por sus multicolores vestidos y sombreros.

 

La pregunta es si el heredero conseguirá una mínima parte de adhesión cuando juega en su contra su actitud con la que fue otro icono, la archifamosa Lady Di. La que será reina consorte, Camila Parker de Cornualles, no suscita ningún entusiasmo entre la gente, y su marido, el nuevo rey y su personalidad son todavía una incógnita como tal. Si quiere ser original y marcar un sello personal, esto jugará en su contra pues la principal virtud de Isabel II ha sido precisamente su presencia anodina y neutra que no se ha definido en ningún caso y ha ofrecido siempre un porte gris, salvo sus trajes. Si quiere ser colorido en su personaje, pretender ser especial y creativo se hundirán él y la institución real. Lo importante es la institución y no la personalidad del monarca parece ser el mensaje que le deja Isabel II. Que se deje de ideas u ocurrencias y que se limite a ser un hombre al servicio de la institución. 

 

Visto desde otro país monárquico como España en que la mayoría no somos ni siquiera una miaja de entusiastas hacia la corona, el caso británico nos deslumbra y desconcierta. Los republicanos jacobinos no conciben que esto pueda ser posible y piensan que es un atavismo anacrónico de la historia que contradice cualquier lógica racional. Nuestro rey Juan Carlos no ha sido ejemplar y más bien ha sido un bribón y un botarate que por él solo ha sido capaz de cargarse la institución monárquica que pende de un hilo. Él era pobre a diferencia de los Windsor cuya reina es una de las mujeres más ricas del mundo con una fortuna personal cifrada en 370 millones de libras y las propiedades de la corona en castillos, mansiones, extensos campos y joyas superan los miles de millones de libras. Juan Carlos nos deslumbró durante un tiempo, pero, desvelado el misterio de su vida, se nos reveló como un casquivano idiota y un hombre con complejo de pobre que ansiaba el dinero como si tuviera miedo de no poder comer al día siguiente. 

 

El misterio de la corona británica es significativo porque la institución goza de un prestigio que no parece acorde con un mundo moderno para desesperación de todo tipo de progresistas, pero uno desde la distancia siente envidia de un país reconciliado en buena parte con una institución atávica pero eficaz como representación simbólica del pasado imperial del Reino Unido. 

34 comentarios :

  1. Los británicos y sus anacronismos: God Save The Queen https://www.youtube.com/watch?v=yqrAPOZxgzU

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    1. Dios salve a la reina
      Su régimen fascista
      Te hizo un tonto
      Una bomba H potencial

      Dios salve a la reina
      No es un ser humano
      No hay futuro
      En el sueño de Inglaterra

      No te digan y lo que quieres
      No te digan y lo que necesitas
      No hay futuro, no hay futuro
      No hay futuro para ti

      Dios salve a la reina
      Lo queremos decir en serio, hombre
      Amamos a nuestra reina
      Dios salva

      Dios salve a la reina
      Porque los turistas son dinero
      Y nuestra figura
      No es lo que parece

      Oh, Dios salve la historia
      Dios salve tu desfile loco
      Dios, ten piedad
      Todos los delitos se pagan

      Cuando no hay futuro, ¿cómo puede haber pecado?
      Somos las flores en el cubo de basura
      Somos el veneno en tu máquina humana
      Somos el futuro, tu futuro

      Dios salve a la reina
      Lo queremos decir en serio, hombre
      Amamos a nuestra reina
      Dios salva

      Dios salve a la reina
      Lo queremos decir en serio, hombre
      No hay futuro
      En el sueño de Inglaterra

      No hay futuro
      No hay futuro
      No hay futuro para ti

      No hay futuro
      No hay futuro
      No hay futuro para mí

      No hay futuro
      No hay futuro
      No hay futuro para ti

      No hay futuro
      No hay futuro
      No hay futuro para ti

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  2. Es una institución que les sirve, les representa ante el mundo y les mantiene de acuerdo. Prácticamente no hay republicanos en Gran Bretaña, ni siquiera entre los escoceses separatistas. Eso da una idea del consenso que suscita la institución. En gran parte gracias a que la reina ha sabido limitarse a representar su papel de jefe de estado, por encima de intereses partidistas y siempre en un equilibrio exquisito de neutralidad ante cualquiera de los problemas de la nación. Los problemas quizás vengan ahora, con un Carlos, que siempre a tenido tendencia a hablar por los codos y meterse donde no le tocaba. Veremos que reinado tendrá Carlos III, recordemos que al primer rey Carlos le cortaron la cabeza y al segundo, su hijo, digamos que le toco en suerte una vida azarosa, con muchas incertidumbres.

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    1. Me pregunto si no fue un tremendo error que el rey Felipe VI interviniera con su famoso discurso sobre Cataluña, previo a la declaración del artículo 155 que limitó la autonomía. Ciertamente, nadie supo sobre la postura de la reina sobre el Brexit o sobre el referéndum de Escocia. Le ha convertido un paria en Cataluña, no sé si un silencio u otro discurso conciliador no hubiera sido mucho más fructífero o por lo menos, menos distorsionante.

      Por lo demás tienes razón sobre la personalidad de Carlos. Ha sido demasiado tiempo a la sombra y siempre tuvo la tentación de intervenir en todo. Ahora ha llegado a la corona en la tercera edad, cuando tal vez ya no le atraía ese papel institucional. En todo caso, suerte.

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  3. Si te jalea la derecha y la ultraderecha no eres un rey de todos. Calladito, en el tema catalán, hubiera estado mejor. Tienes razón.

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    1. Su error es de los que no admiten enmienda puesto que fue un discurso tajante al que le faltó tacto y conocimiento de la situación en profundidad. No obstante, para muchos fue un alivio conocer la posición del monarca. En Cataluña muchos que se sentían amenazados por la situación lo vieron como una muestra de apoyo ante el sinsentido del golpe de estado de los días 6 y 7 de septiembre. No obstante, visto en perspectiva, fue un error, tal vez habría sido mejor algo neutro y conciliador, o mejor todavía, el silencio habría sido más elocuente. Cuando lo oí me quede conmocionado y me di cuenta de que era un error gravísimo de libro. Tenía que haber callado.

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    2. Para una mayoría de catalanes, entre los que me cuento y que no necesariamente son independentistas, da igual, si el coronado habló, rebuznó o cantó por soleades... Sabíamos cual era el discurso y la posición de la corona, con respecto a Catalunya, aunque no se hubiera producido.

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    3. La respuesta que te daría sería muy larga, pero sé, de antemano que no serviría de nada. Es inútil. Siento sí, que el rey se equivocara en aquel trance tan difícil.

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    4. No te preocupes. En realidad me importan poco los cantares del rey.

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  4. Solventado el problema. Ya estás en el lateral.
    Mañana entro a escribir sobre el tema.
    Un abrazo

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  5. Quizá lo único que nos una es precisamente la corona, JOSELU. No veo una España unida si falla la misma, antes bien, como cainitas que somos nos tiraríamos los trastos a la cabeza, pues nuestro sino es siempre buscarnos las cosquillas.
    No hay ningún gobierno autonómico preparado para gobernar en solitario. Ni siquiera las autonomías de libro. Los vascos y navarros funcionan bien porque no son solidarios con el gobierno central versus los impuestos que recaudan, iva y fueros; los gallegos son los últimos de la clase y los catalanes se odian entre si y son incapaces tan siquiera de ir al unísono para crear una fuerza independentista, pues es lo que les separa que lo que les une.
    Creo, eso si, que la monarquía es obsoleta y anacrónica y ya no cumple aquella misión que podía cumplir hace doscientos años.
    Vamos hacia otro tipo de gobierno. No se si hacia una república federal, que pienso, sería lo más lógico.
    Un abrazo y contento de poder escribir sin problemas otra vez.
    Salut

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    1. "pues es MÁS lo que les separa que lo que les une"

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    2. Por lo que sé los sistemas federales puros son adecuados para países con una fuerte cohesión interna, caso de Suiza, de Alemania, de Estados Unidos. Nosotros tenemos un sistema quasifederal y ya vemos cómo funciona. Tú mencionas con frecuencia las diecisiete autonomías como gastos desproporcionados, burocracias carísimas, televisiones autonómicas como fuente de manipulación y de gasto elevadísimo. Un sistema todavía más radical no nos ayudaría en absoluto para la cohesión y sería todavía más oneroso. La cohesión es un sentimiento interior que existe o no existe y da igual el sistema político que se aplique. Sé que están los federalistas de izquierda en el PSC pero no sé si estarían de acuerdo en una república con estados federados como Cataluña, Murcia, la Rioja, Cantabria o Extremadura por poner ejemplos aleatorios. Pienso que no es una demanda extendida la de la estructura federal y no creo que los independentistas catalanes siquiera la consideren porque lo que quieren es la independencia radical.

      En cuanto a la corona, pienso que es cierto que es una de las instituciones que cohesionan este país, la corona, la liga, el AVE, los bares, pero ya sabemos que en Cataluña no es así. Felipe VI cometió un gran error, como he dicho, pero algún comentario de Noxeus viene a decir que hubiera sido lo mismo si hubiera permanecido callado porque ya se suponía lo que pensaba. En realidad no sé qué es lo que nos mantiene juntos... pero España es más resiliente de lo que parece. Una pena todo esto y por eso envidio la monarquía británica, por ese elemento de cohesión que supone. Ni siquiera los escoceses la ponen en cuestión, como se ha dicho. Salut, Miquel, un abrazo.

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  6. Cuando me refiero a una España federal, Joselu, lo hago pensando en el PIB de cada región, o sea, que cada uno cabalgue con lo suyo. Navarra y País Vasco son las más desconsideradas con el resto del estado, que no es el caso de Cataluña.
    Como nexo estaría el ejército y la sanidad, a la que les quitaría a todas las autonomías las competencias.
    La educación sería un asunto a tratar, porque es muy complejo.
    Un abrazo

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  7. A mi también me choca la admiración que suscita la corona en Reino Unido, supongo que es una idea que se inculca de padres a hijos o en la educación tal vez, algo que normalizan desde pequeños. En nuestro país no es así y hay opiniones para todos los gustos. Personalmente, no tengo simpatía por la monarquía, aunque tampoco me caen mal, de no haber una casa real, otra figura la sustituiría en su labor de dar buena imagen y creo que me daría igual.

    En todo caso, la anciana se fue y le deja la papeleta a su hijo, al que yo tampoco veo muy cautivador, el tiempo dirá lo que el nuevo monarca da de sí, no lo tiene fácil creo yo.

    Un abrazo Joselu!!

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    1. Veo las ceremonias y los rituales, casi medievales, que llevan a cabo, para la entronización del nuevo rey y me quedo boquiabierto por su anacronismo absoluto, pero lo cierto es que tienen gracia y uno los entiende como centro de una visión que es atractiva a pesar de su atavismo yo diría que literario. No me extraña que el mundo de Harry Potter surgiera del Reino Unido y ya vemos el magnetismo que posee. A la monarquía española le falta glamour, pero es que es una monarquía pobre y humilde, que tiene que estar pidiendo perdón continuamente por existir, dado su origen. Por el otro lado, está la Francia republicana a la que le son consustanciales asimismo las ceremonias y los trajes de época y tiene también una puesta en escena teatral. Un cálido abrazo, Ana.

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  8. Ahora ya no se dan las circunstancias, pero antes habia en Catalunya mucho Juancarlista, el campechano. Caía bien a mucha gente. Carlos III no cae bien, tendrá problemas, quizás hubiera sido mejor abdicar en favor de su hijo. Isabel II le ha dejado un buen papelón...

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    1. Pienso que el rey Carlos ha aprendido, es un septuagenario y sus actos estarán medidos por la prudencia. No es el joven inquieto de sus veinte o treinta años. Sus primeros pasos han sido en este sentido. Ser rey está por encima de ser un individuo. Por otra parte, nuestro exrey fue tan imprudente y mastuerzo que nos ha dejado un terrible mal sabor de boca. Fue inmaduro y dilapidó todo el caudal que tuvo en un primer momento de admiración colectiva. Creyó que todo estaba permitido y que siempre todo le sería perdonado o tolerado. Y se equivocó gravemente. Su hijo ha tenido ocasión de aprender en cabeza ajena. Y sí que es cierto que Juan Carlos tuvo muchos admiradores en estas tierras. Una pena.

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  9. Desde fuera (de Inglaterra) constatamos que fue la venerada Reina Madre para los súbditos ingleses… y solo fue Reina pero jamás Madre para su prole, así lo ha revelado en algunos comedidos reproches que, esporádicamente, ha dejado escapar Carlos de Inglaterra (ahora rey).

    El rol materno de Isabel II siempre fue secundario (o terciario…) frente al compromiso como reina de su Nación. Lo de ser madre atenta y cariñosa quedaba en manos de un ejército de institutrices.

    ¿Entenderían esto unos críos de 6, 8, 10… años? Obviamente no, pero eso es ser miembro de una familia real, al menos la inglesa.

    ¿Marcó esto el carácter de aquel crío, Carlos de Inglaterra? Hombre, es de suponer. Al chico, como futuro rey, lo educaron para reprimir esas emociones y sentimientos (tan vulgares y meridionales, que diría algún Sir) derivados de una infancia infeliz, pero parece que Carlos era persona muy sensible, y no podía ocultarlo así como así. No salió a su madre ni a su padre, un problema.

    Carencias afectivas que no parecen importar mucho (exceptuando el caso Lady Di) a la ciudadanía inglesa, no la vemos cuestionarlo con gran interés (¿cosa de la famosa flema británica?), como si tuvieran asumido que Isabel II, antes que madre de sus vástagos, es ante todo la madre de toda una nación, del mismo pueblo inglés.
    Ella tiene sentido para su pueblo como reina de Inglaterra, no como madre de Carlos, Ana, Andrés y Eduardo, punto.

    Nada que criticar, es un sentimiento sui géneris de la ciudadanía inglesa cuyo significado íntimo se nos escapa aquí, dado nuestro sureño apego familiar.

    Si el buen hacer de la reina Isabel II (ser reina/rey es un oficio, dicen) se mide por el cariño de sus súbditos, la finada monarca ha hecho un trabajo impecable, y no han de sorprendernos esas muestras sinceras de profunda pena mostradas por sus súbditos.

    Dicho esto, trasladamos la monarquía inglesa al sur de los Pirineos… y el asunto me deja perplejo, a nivel político especialmente.
    Me quedo ojiplático por la “profunda pena” que exhibe (es eso, exhibicionismo) la Señora Díaz Ayuso, Comunidad de Madrid mediante.
    A ver, es correcto que una nación muestre sus condolencias al gobierno y ciudadanía de otra por la pérdida de, en este caso, su reina. Pero lo que aquí observo va muuucho más allá.

    Tres días de luto oficial por esta célebre reina inglesa, de un lado el babear de la señora Ayuso, CAM en ristre, en mostrar sus condolencias… frente a la absoluta indiferencia que tendría esta reina por mi comunidad madrileña (aunque tampoco se lo reprocho, no se vivía de su estima), sus moradores civiles y políticos, u otras comunidades patrias con el toro de Osborne por icono.

    Todas estas patéticas genuflexiones hacia un reinado inglés (el de Isabel II) y su sociedad, que mayormente han mostrado absoluta indiferencia (cuando no desprecio, léase PIGS) por este país y sus ciudadanos; eso sí, quedando al margen nuestras playas mediterráneas con lo chiringuitos varios.
    De alguna manera les significamos eso… sus camareros.
    Los servimos con la sonrisa en la boca, luego ellos eructan echándonos los fétidos efluvios del alcohol, tiran las sobras al suelo, y nosotros recogemos todo religiosamente sin parar de sonreírlos, faltaría más, porque aquí gastan mucha money.

    Me pregunto si alguna p… vez me va ha dejar de abochornar este esperpento que tenemos en la presidencia autonómica.

    Descanse en paz The Queen… yo también tengo mi sensibilidad.
    Un abrazo, amigo Joselu.

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    1. Ácido corrosivo rezuma tu excelente comentario, afilado como un cuchillo gallego, sobre la realidad de la soberana, madre de un país que en general nos desprecia abiertamente. Has echado sal en la herida y puesto de manifiesto la impostura truculenta y babosa de declarar tres días de luto oficial, algo que carece de todo fundamento y muestra un seguidismo y un complejo de súbdito inaudito.

      Ciertamente el mundo británico plásticamente es excelente. Amamos sus escritores, su música, su percepción de la política, un país en líneas generales reconciliado consigo mismo y orgulloso de su pasado, tanto que parece el negativo del nuestro, un país en el que no creemos en nosotros y deploramos nuestra historia y nuestra realidad, y hasta nuestra monarquía, infinitamente más pobre y pedestre, resulta ser un remedo burlesco de la suya.

      El Reino Unido es una nación orgullosa/altiva y España es ¿una nación? rota por dentro y que se mantiene con alfileres por sus descosidos territoriales y su complejo de inferioridad que no ha aliviado la democracia pues lo tenemos casi en nuestro código genético. En este sentido hay que interpretar el happening de Isabel Díaz Ayuso. Nosotros pedimos perdón por ser como somos mientras que los británicos miran de soslayo a todo el mundo y son ellos los que marcan las tendencias universales.

      Anhelaría un país que creyera más en sí mismo, que tuviera fe en sus posibilidades. No quiero la vendetta del pobre, del camarero que recoge los vómitos de los británicos de Benidorm o La playa de las Américas que miran con desdén a los que trabajan por un salario mínimo y están a su servicio.

      Tu comentario, sin ninguna demagogia, abre heridas.

      Lo del luto oficial, sin necesidad de aludir a Gibraltar como ha hecho una periodista, es como mínimo penoso y avergonzante.

      Abrazo sentido, Paco.

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  10. Por cierto, hablando de muertes... me acabo de enterar que esta misma tarde ha fallecido Javier Marías. Ésta la siento más que la otra, fíjate...
    Descanse en paz.
    Abrazo

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    1. https://elpais.com/cultura/2022-09-11/muere-el-escritor-javier-marias.html

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    2. Sí, Paco, me enteré poco después de las cinco y fue para mí un hachazo, sobre todo por lo imprevisto de la noticia. Ignoraba que se encontrara enfermo. Lamento profundamente su muerte por el altísimo aprecio que tengo a su narrativa, y esperaba varios libros más todavía. Terrible. Todavía estoy conmocionado. Abrazo.

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  11. Ronda por Internette la escena donde el rey con nombre de coñac hace apartar el tintero para rubricar no se que de su aposentamiento con unos modales más dignos de un guardador de piaras que de un rey que quiere hacerse amar.
    Rezuma soberbia .
    Un abrazo...y otro para Paco Castillo ¡¡¡¡¡¡¡

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    1. He visto las imágenes, pero hay que reconocer que la mesa estaba llena de cachivaches molestos y no había forma de firmar, y, además, los nervios del momento. A partir de ahora, se le escrutará cada movimiento de las cejas. Un abrazo, Miquel.

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  12. Buenas tardes primero dejo el discurso del Rey el día de "autos", porque pienso que nadie realmente lo escucho y menos leer.
    "Mensaje de Su Majestad el Rey
    Palacio de La Zarzuela, 3 de octubre de 2017


    Buenas noches,

    Estamos viviendo momentos muy graves para nuestra vida democrática. Y en estas circunstancias, quiero dirigirme directamente a todos los españoles. Todos hemos sido testigos de los hechos que se han ido produciendo en Cataluña, con la pretensión final de la Generalitat de que sea proclamada −ilegalmente−la independencia de Cataluña.

    Desde hace ya tiempo, determinadas autoridades de Cataluña, de una manera reiterada, consciente y deliberada, han venido incumpliendo la Constitución y su Estatuto de Autonomía, que es la Ley que reconoce, protege y ampara sus instituciones históricas y su autogobierno. Con sus decisiones han vulnerado de manera sistemática las normas aprobadas legal y legítimamente, demostrando una deslealtad inadmisible hacia los poderes del Estado. Un Estado al que, precisamente, esas autoridades representan en Cataluña. Han quebrantado los principios democráticos de todo Estado de Derecho y han socavado la armonía y la convivencia en la propia sociedad catalana, llegando ─desgraciadamente─ a dividirla. Hoy la sociedad catalana está fracturada y enfrentada. Esas autoridades han menospreciado los afectos y los sentimientos de solidaridad que han unido y unirán al conjunto de los españoles; y con su conducta irresponsable incluso pueden poner en riesgo la estabilidad económica y social de Cataluña y de toda España.

    En definitiva, todo ello ha supuesto la culminación de un inaceptable intento de apropiación de las instituciones históricas de Cataluña. Esas autoridades, de una manera clara y rotunda, se han situado totalmente al margen del derecho y de la democracia. Han pretendido quebrar la unidad de España y la soberanía nacional, que es el derecho de todos los españoles a decidir democráticamente su vida en común.

    Por todo ello y ante esta situación de extrema gravedad, que requiere el firme compromiso de todos con los intereses generales, es responsabilidad de los legítimos poderes del Estado asegurar el orden constitucional y el normal funcionamiento de las instituciones, la vigencia del Estado de Derecho y el autogobierno de Cataluña, basado en la Constitución y en su Estatuto de Autonomía.

    Hoy quiero, además, transmitir varios mensajes a todos los españoles, particularmente a los catalanes. A los ciudadanos de Cataluña –a todos− quiero reiterarles que desde hace décadas vivimos en un Estado democrático que ofrece las vías constitucionales para que cualquier persona pueda defender sus ideas dentro del respeto a la ley. Porque, como todos sabemos, sin ese respeto no hay convivencia democrática posible en paz y libertad, ni en Cataluña, ni en el resto de España, ni en ningún lugar del mundo. En la España constitucional y democrática, saben bien que tienen un espacio de concordia y de encuentro con todos sus conciudadanos. Sé muy bien que en Cataluña también hay mucha preocupación y gran inquietud con la conducta de las autoridades autonómicas. A quienes así lo sienten, les digo que no están solos, ni lo estarán; que tienen todo el apoyo y la solidaridad del resto de los españoles, y la garantía absoluta de nuestro Estado de Derecho en la defensa de su libertad y de sus derechos.

    Y al conjunto de los españoles, que viven con desasosiego y tristeza estos acontecimientos, les transmito un mensaje de tranquilidad, de confianza y, también, de esperanza. Son momentos difíciles, pero los superaremos. Son momentos muy complejos, pero saldremos adelante. Porque creemos en nuestro país y nos sentimos orgullosos de lo que somos.

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    1. Porque nuestros principios democráticos son fuertes, son sólidos. Y lo son porque están basados en el deseo de millones y millones de españoles de convivir en paz y en libertad. Así hemos ido construyendo la España de las últimas décadas. Y así debemos seguir ese camino, con serenidad y con determinación. En ese camino, en esa España mejor que todos deseamos, estará también Cataluña.
      Termino ya estas palabras, dirigidas a todo el pueblo español, para subrayar una vez más el firme compromiso de la Corona con la Constitución y con la democracia, mi entrega al entendimiento y la concordia entre españoles, y mi compromiso como Rey con la unidad y la permanencia de España.

      Felipe R."

      Como podemos ver es de un "fascista subido", ni Mussolini o Hitler pueden ser más fascistas… ejem, ejem, me ha dado la tos...

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  13. En otro orden de cosas, la Monarquía Parlamentaria es un sistema político. Si Juan Carlos I ha tenido devaneos con algunas mujeres, la verdad es que me da igual, será cosa de él y de la Reina Sofia, no del resto de los españoles, que esto parece un programa de corazón mezclado con un puritanismo más propio del siglo XVI o XVII.
    El tema fiscal de Juan Carlos I, cuando uno realiza una actividad fuera del país puede elegir tributar aquí o allí. Juan Carlos I eligió allí, mal por su parte, pero lo mismo hizo la selección nacional de futbol en Sudáfrica y Austria por ejemplo y nadie habla de eliminar el futbol, o yo no lo he oído. la regularización fue de esto.
    Los regalos no fueron a cargo del erario español, ni los pago empresa española alguna, fueron regalos de jeques y es una costumbre allí. Si, señores, es una costumbre de allí dar un regalo a quien ha intermediado en un negocio y lo paga el que paga el negocio, el desconocimiento lleva al error. ¿Qué ese dinero se lo gasta en putas caras?, pues era cosa de él y de la Reina. Lo de matar elefantes no es que lo vea mal que lo es, es que me parece una autentica salvajada, una estupidez y una tropelía, pero ya pidió perdón por ello, aunque algunos quisieran crucificarle en la plaza pública. Ya sabemos cómo es la naturaleza humana, nos gusta crucificar públicamente, así aparecemos como “los puros”.
    Luego tenemos el tema del 23 F, al igual que los que estamos aquí yo no tengo idea de lo que ocurrió, solo lo que hemos visto por TV. Pero siempre hay que preguntarse ante hechos de estas características ¿Quién gana?, es un buen camino a seguir, creo yo.
    En el caso del golpe de Estado en las provincias catalanas ganaba una burguesía cobarde y mezquina que quería manejar el "cotarro", los mismos que aplaudían rabiosamente a Franco o sus hijos ahora se han "metamorfoseado" en separatistas, es curioso, pero son los mismos, no otros los que han capitaneado este “movimiento”.
    La misma burguesía acomodada y vaga que puso al pie de los caballos a mujeres, niños y ancianos para sacar la "foto" que mandar a los titulares internacionales comprados. Le salió mal, no hubo heridos más allá de una persona a la que le habían roto “los seis dedos de una mano” o eso decía. Ellos eran los que ganaban con la independencia, nadie más.

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  14. Estamos más de acuerdo de lo que parece, Daniel. Es difícil contrapuntear todos los aspectos que has señalado, y pienso que sería contraproducente intentarlo hacer. Oí en su momento el discurso de Felipe VI cuando la crisis de octubre de 2017 y me rechinó, oído desde Cataluña. Fue de una dureza contundente, tal vez con todas de la ley, pero no oído desde aquí donde vivo y he de saber que estoy en Barcelona y no en Burgos o Madrid. No sé si se podría haber redactado otro tipo de discurso, pero aquel no fue bueno para este lugar de España. Cuando Felipe viene aquí es un paria, nadie lo quiere recibir, la monarquía incluso entre personas no extremistas ha perdido toda capacidad de mediación. Dijo correctamente muchas cosas, pero no sé si fueron las adecuadas o si hubiera sido mejor el silencio, como le aconsejó el gobierno. Ahora sus cartas están marcadas y es difícil que sea rey reconocido de este ángulo de España. Y lo siento porque es un hombre que lo tiene muy difícil y lo está haciendo bastante bien. Aquel discurso podría haberlo redactado Fernando Savater, pero eso no quiere decir que fuera bueno para unas circunstancias como aquellas. Metió, con razón, el dedo en el ojo, pero tú sabes que para vender camiones tú no metes el dedo en el ojo. El gobierno actuó como debía, aplicando el 155, pero el rey es otra figura de equilibrio y neutralidad que no debe implicarse en debates políticos y entonces lo hizo con una dureza que escoció. Y hoy no es nada por aquí. Perdió todo su juego. Me duele porque es mi rey. Soy monárquico porque sé que es el régimen menos malo para España pero yo sería republicano utópico, aunque sé que las repúblicas acaban muy mal por aquí.

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  15. No me gusta un rey que pierde el oremus por un coño y una cara guapa que se le ponga delante. La entrevista en los años noventa por una periodista británica fue bochornosa porque ella sabía que lo estaba seduciendo y él solo pensaba en cómo tirársela. Eso delante de las cámaras. Sentí vergüenza de semejante botarate. Y todo lo que se ha sabido de sus ligues ha sido vergonzoso. No afecta solo a Sofía. Supongo que si en tu matrimonio tus hijos te hubieran visto perdiendo el norte por joder con cualquiera amiga de tu mujer, se habrían avergonzado. No hubiera sido solo un problema entre tú y tu mujer. Y tú no eras así. El rey abusó de su blindaje mediático actuando como si fuera un rey del siglo XIX y los tiempos han cambiado.

    En cuanto a que fuera un excelente embajador, no digo que sea incierto. Tenía mucha mano en las relaciones con el Golfo Pérsico y empresas españolas hicieron importantes negocios, pero por lo que se ha sabido, él sacaba tajada. En esa actitud se confundía el papel institucional con el comisionista y eso es normal que cuando se ha podido hablar del tema, la ciudadanía lo ha visto fatal.

    No, no lo hizo bien, su desprestigio ha sido ganado a pulso. Un rey putero y comisionista, un rey tonto que se dejo manipular por huríes de lujo que lo llevaron de la ceca a la meca. No es el perfil que yo querría para un monarca español. Creyó que todo le estaba permitido y se equivocó. No es un hombre muy inteligente aunque presumía de tener sentido de la oportunidad política. Su hijo es mucho más prudente, salvo en el tema catalán. Saludos.

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  16. Mi opinión sobre los reyes es simple y tajante. Simplemente no entiendo como puede existir a día esa figura. En ningún lado. Ninguna ni ninguna. Así de emocional e infantil es mi opinión.

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    1. Infantil no, porque a los niños y a las niñas les encantan los cuentos de reyes, príncipes y princesas, puedes hacer una encuesta rápida en casa. Ahora creo que han filmado una nueva versión de La sirenita en que esta ahora es negra, acorde con lo correcto.

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  17. Joselu, con tu permiso, me gustaria saber que parte del discurso arriba expuesto te ha parecido ofensivo. Esta invitación la hago extensiva al resto de los presentes, si les apetece contestar claro.
    La verdad es que me "pica" la curiosidad.

    Un saludo.

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    1. Mira, Daniel, he vuelto a leer lo que te escribí y lo vuelvo a suscribir. Te escribí que lo que dijo era dicho con todas las de la ley pero no era adecuado para las circunstancias aquella en Cataluña. No olvides que tú vives en Burgos y yo en Barcelona, y puedo percibir mucho más la sensibilidad que existe por aquí. Te dije que lo podía haber escrito Fernando Savater, impecable democráticamente, pero obtuso y claramente equivocado para unas circunstancias como aquellas. Las consecuencias las vive el rey cada vez que viene a Cataluña. Muchas veces las verdades hay que callárselas, lo vivo cada día en mi casa, para mantener la paz social. El rey para los independentistas era poca cosa pero ahora es un don nadie. Y son mayoría aunque no me guste. Un saludo.

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