He tenido muy escasa relación personal con judíos en mi
vida. En mi infancia había en Zaragoza
una procesión llamada de los judíos
en la que había que escupir al suelo cuando pasaban los cofrades que habían
entregado a Jesús. Yo no sabía que
era un judío en la realidad. Por eso en 1967 recibí con ansiedad las noticias
en la televisión de que una multitud de países árabes se aprestaban a una
guerra contra el pequeño estado de Israel.
Se decía que querían echar a los judíos al mar. Fue la Guerra de los Seis Días cuyo resultado supongo que todos conocen.
Luego viajé por Europa y recuerdo en
un compartimento de tren a una pareja israelí con la que estuve discutiendo
airadamente sobre la política del estado de Israel con los palestinos. Ellos arguyeron que las tierras de Israel las habían comprado a los árabes
durante el proceso sionista anterior a la Guerra Mundial. En Estados Unidos unos hermanos judíos,
una chica y un chico, nos cogieron en autoestop a un compañero y a mí. Nos
llevaron a Nueva York donde
estuvimos en casa de otro judío que nos acogió en su casa durante una semana
así por la cara sin conocerle. Se llamaba Ira
y vivía en la calle 84 o Edgar Alan Poe.
El tema judío me ha ocupado muchas horas de reflexión y he leído infinidad de
libros que reflexionan sobre el Holocausto.
No faltan los de Primo Levi, por
supuesto, probablemente unos de los libros más valiosos del siglo XX. El último
que leí fue de Hannah Arendt sobre
el proceso a Eichman en Jerusalem en que desarrolla su tesis
conocida de la banalidad del mal.
Ello le llevó a ser rechazada por el judaísmo internacional y acusada de
autoodio. Sus tesis más sangrantes son las que responsabilizan a los Consejos Judíos de haber colaborado con
el exterminio nazi. En cierta manera, Primo
Levi en Los hundidos y los salvados
corrobora que eran los kapos judíos los que organizaban el proceso de selección
de las víctimas que eran llevadas posteriormente a las cámaras de gas, y
quienes les quitaban luego el cabello y los dientes de oro.
Todo lo que tiene que ver con la realidad judía tiende a la
desmesura. Nada es matizado en relación a los judíos. Es gigantesca su creencia
de ser el pueblo elegido y la esperanza todavía en el Mesías. Es gigantesca su derrota por el emperador Diocleciano y su condena a la diáspora a través del mundo por donde
vagaron a través de los siglos sin ser admitidos en ninguna parte. Sus
comunidades crecían y se apoyaban unos a otros teniendo una gran facilidad para
la banca y los negocios, así como para el arte, la ciencia y el pensamiento.
Pero en todos los lugares fueron acusados de los más terribles crímenes y toda
la historia está jalonada de persecuciones, matanzas y odios sin fin. En España fueron expulsados en 1492 y
perdimos a una élite financiera y económica trágicamente. Los que quedaron
fueron condenados al desprecio y la deshonra, cambiando sus nombres y siendo
vituperados, además de quemados vivos si persistían en sus prácticas judaicas o simplente que alguien los acusara de ello.
No es fácil ser judío. Lo presiento. Recuerdo al joven que
hacía chistes macabros sobre los campos de exterminio burlándose de los judíos.
Luego me enteré que él era precisamente judío. Ser judío es llevar un destino
marcado en la frente y la soledad y el odio ajeno y el autoodio. Tienen que ser
carne de psiconalista. Estos días leo en los comentarios en FB opiniones que
hablan de su malignidad, de que no sienten nada por el dolor ajeno, de que son
como serpientes diabólicas, de que controlan todos los bancos del mundo, de que son asesinos,
criminales, genocidas, se los compara con los nazis recurrentemente y se liga
su estrella de David con la Cruz Gamada. Por otro lado, si observo
la historia de la ciencia, la literatura y el pensamiento da escalofríos darse
cuenta de que las aportaciones más impresionantes en todos los órdenes han sido
creadas por judíos en los cinco últimos siglos. Es una comunidad pequeña pero
que ha dado dosis inverosímiles de genio e inteligencia, y que en cierta manera
ha conformado el mundo moderno (Marx,
Freud, Einstein, Kafka... y miles más en todas las áreas del conocimiento).
No olvidemos que Jesús de Nazareth
era judío y por él estamos donde estamos y contamos el tiempo como lo contamos.
Y fue crucificado por el mismo pueblo judío tomando al ocupante romano como
brazo ejecutor.
No es fácil ser judío y todo lo que está en contacto con
ellos es excesivo y tendente a la pérdida de la dimensión. Estos días se habla
mucho de ellos y yo presiento ese odio generalizado hacia ellos aunque sea
inconsciente. En el mundo hay violencia brutal por todos lados, pero cuando
entran los judíos de por medio, inmediatamente surge la acusación de genocidio,
de etnocidio, de criminales de guerra, algo que no se plantea en situaciones
infinitamente más crueles y brutales. Y además muchos judíos se reúnen en
manifestaciones en Estados Unidos
para protestar contra la política del estado de Israel, e importantes personalidades del mundo –judías o no, pero
es significativo que bastantes lo son- condenan la brutalidad del gobierno de Israel. Eso no se percibe demasiado y
se ignora la pluralidad de la comunidad judía.
¿Cómo es posible que un conjunto de personas que no superan
en el mundo los diez millones puedan provocar una onda sísmica en contra de
ellos en cuanto su entidad política ejerce una violencia que todos los
regímenes de la zona hacen sin la más mínima limitación? La historia de todos
los países de Oriente Próximo es brutal: Siria,
Líbano, Irak, Irán, Jordania, Afganistán. Allí en medio está Israel solo. Concitando todo el odio
del mundo contra ellos. El que viene de los países árabes y no árabes y luego
el de buena parte de Occidente que
sienten como genocida todo lo que viene de Israel. Seguro que alguien en
seguida me dirá que se lo han ganado a pulso. Yo dudo.
Me dirán que esto es un problema concreto, pero yo siento que debería ser objeto de un
psicoanálisis a nivel mundial. El gran descubrimiento del pensamiento judío es
la Culpa, la culpa metafísica. Y todos la sentimos dentro o la proyectamos con
facilidad fuera. Culpa, crimen, castigo, penitencia, odio, venganza...
Pues yo me enorgullezco de admirarlos. El Holocausto aniquiló la población judía en mi país, la más numerosa en Europa antes de la IIGM, y yo lo percibo como un agravio personal- me deprivaron de una parte muy importante de mi legado cultural.
ResponderEliminarNo me gusta lo que hace Israel, sobre todo cómo educa a sus jóvenes en odi. Pero eso no tiene nada que ver con lo que opino sobre los judíos. Ahora, a ver cuándo me pegan por opinar lo que opino, que ya he tenido problemas aquí en España.
Es significativo que temas algún tipo de agresividad por tus opiniones, y que reconozcas que has tenido problemas en España. Eso es algo que los nacidos en este país no podemos detectar. Hace falta una mirada externa, como la tuya, para decirnos: oye, que aquí pasa algo, lo que puede sugerir un potencial antisemitismo, extraño, porque en España apenas hay judíos. Yo, al menos, nunca he conocido a uno afincado permanentemente en España y no he oído de nadie que haya tenido relación con ellos. De todas maneras, esto confirma mi intuición de que existe un larvado antisemitismo que no se quiere reconocer, y que se justifica únicamente con el rechazo a la política del gobierno de Israel.
EliminarMe uno a tu admiración por ese pasado judío que fue amputado en tu país por el nazismo y todos los colaboracionistas que hubo en la difusión de ese odio hacia ellos.
Bien. Pero a estas alturas deberíamos comenzar a distinguir entre Israel y los judíos para ir aclarándonos un poco. Mientras tanto, nos seguiremos enredando en cosas que no irán a ningún sitio más que a una espiral de violencia.
ResponderEliminarHay que distinguir entre Israel y los judíos, y entre el gobierno de Israel y los israelíes, muchos de los cuales son contrarios a la política de su gobierno. Esto es cierto, pero advierto que no hay excesiva matización en la consideración popular de esta serie de distinciones y, rápidamente, se amplía, a generalizaciones como que los judíos controlan el mundo, los bancos, los EEUU, y de ahí surge la imagen del perverso judío que mueve los hilos de Israel. No es fácil esta distinción, aunque de hecho es real.
EliminarHe pensado y he leído mucho estos días a raíz de tus escritos. La fundación de Israel creo que fue un error a pesar de haber comprado parte de las tierras. Sin embargo el mal ya está hecho, y ahora lo mejor sería que todos vivieran en paz.
ResponderEliminarLos ataques que está haciendo Israel son desproporcionados, su actuación es inmoral, y además desde el punto de vista práctico no les beneficia ya que su imagen está cada vez más deteriorada por mucho que se esfuerzan en mostrar que actúan civilizadamente.
Está claro que Hamas tampoco actúa bien, utiliza a su pueblo, y los actos terroristas que han cometido son execrables, pero Israel debe buscar otros medios de defensa. Tener a un pueblo oprimido es un gran injusticia.
Y cada vez que alguien reprocha su actuación a Israel salen con lo mismo: el odio a los judíos. No odio a los judíos, me pasa como a ti, admiro a muchos de ellos y lamento la persecución a que han sido sometidos, pero son un pueblo dominado por el miedo, y cuando el miedo manda se hacen muchas barbaridades.
La memoria histórica es muy poderosa. No se la quita uno de encima por propia voluntad. Ser judío es ser diferente y en buena manera significa ser rechazado por un estigma que viene en el ADN y en la historia. Incluso en los EEUU hubo un rampante antisemitismo que impedía que los judíos accedieran a determinadas industrias o negocios. Así se recluyeron muchos en el cine americano que lleva en sus orígenes la huella de apellidos judíos pues allí tenían permitido su participación. La mayor parte de las industrias de cine americanas eran de capital judío. Así que en buena manera, nuestra forma de ver el mundo ha sido matizada por la perspectiva judía.
EliminarY sí, es cierto que el miedo es una constante en los judíos. ¿Quién no lo tendría si en todos los sitios donde han estado han sido perseguidos y asesinados? Si tus padres y abuelos hubieran sido asesinados ¿qué esperarías? ¿Qué sentirías? ¿Y si eso hubiera pasado a lo largo de toda la historia? No es una cuestión fácil.
No me imagino que haría en el caso que dices, como tampoco me imagino qué haría si me sacaran de mi casa a empujones o si, buscando terroristas, bombardearan mi pueblo. No creo que sea bueno subjetivizar los debates, yo he intentado ser imparcial al darte mi opinión. Sospechas que detrás de las críticas a la actuación de Israel hay antisemitismo y te basas en las opiniones que percibes por las redes y en la ausencia de reacciones frente a otros conflictos. Creo que estás mezclando dos temas: uno si hay antisemitismo en España, o en las redes, y otro, el juicio sobre la actuación de Israel. Sobre lo primero carezco de conocimiento, pero entiendo que una opinión sobre lo primero no debe interferir el juicio sobre lo segundo. Parto de la base de que la actuación de Israel (o de quien sea en el conflicto que sea) se puede juzgar objetivamente: hay que leer las noticias y tratar de responder a preguntas concretas como ¿eso está bien? ¿tienen otra opción? ¿qué parte tiene más responsabilidad en lo que ha sucedido? ¿qué consecuencias va a tener esto en un futuro? Está muy bien decir que el conflicto es complejo, yo también lo pienso, pero me gustaría saber qué respuestas das tú a esas preguntas concretas.
EliminarPienso que las potencias (UE, EE.UU, Países Árabes...) deben presionar fuertemente para detener el conflicto.
EliminarMe preguntas sobre si está bien la reacción de Israel ante el ataque con misiles sobre su territorio. ¿Qué puedo decir? Que es desproporcionada. Que no se deben utilizar ciertas potencias de fuego cuando está en medio la población civil, que es excesiva su respuesta. Supongo que en eso estaremos de acuerdo.
La reacción de Israel se basa en la creencia de que para parar a Hamás debe infligir un sufrimiento que sea inaceptable, que en el caso palestino es mucho mayor que el de la población israelí. Esto quiere decir que los palestinos están dispuestos a sufrir mucho más que ellos. Supongo que recordarás el canje que hubo de un prisionero israelí en manos de Hamás a cambio de 1000 palestinos. Esa es la diferencia en cuanto a valor que adjudican unos y otros a la vida humana. Israel querría rompler la columna vertebral de Hamás en Gaza, objetivo que desean también todos los países árabes de la zona, puesto que Hamás representa un fanatismo y un radicalismo que no ayuda nada a la resolución del conflicto. Fíjate la escasa reacción de la Autoridad Palestina en relación al conflicto. Hamás es un escollo que dificulta la solución y a la vez viene bien a Israel para justificar sus ataques.
¿Qué parte tiene más responsabilidad en lo que ha sucedido? Me pides que sea objetivo, pero no se puede ser objetivo. Tú mismo/o misma no era objetivo al formular una pregunta que lleva implícita una respuesta a favor de que ahora responda que la parte más responsable es la más poderosa, o sea, Israel. Tal vez sea esa la respuesta.
¿Qué consecuencias va a tener esto en un futuro? Hace cinco años se produjo una invasión de la franja de Gaza por parte del ejército israelí. Escribí sobre ello. Te dejo la referencia: GAZA. Lo he releído y creo que fundamentalmente estoy de acuerdo con lo que escribí en enero de 2009. No solucionará nada. Hamás se alimenta del martirio y crece en él. Aumentará, si cabe, el odio mutuo, y se cerrarán totalmente los caminos posibles a un entendimiento. Los israelíes piensan que ceder es ponerse en grave riesgo y además son prepotentes y racistas respecto a los palestinos. Esto no impide que no sientan a la vez terror a la mayor natalidad de los palestinos y su también mayor capacidad de sufrimiento. No hay solución, si me pides que alumbre una posible solución, no pienso que la haya. Esta crisis se acabará de un modo u otro y entraremos nuevamente en un tiempo de contención mutua cuando ambos hayan sufrido. Israel lleva más de treinta muertos. Me dirás que no son demasiados los muertos israelíes respecto a los palestinos, pero ya hemos dicho que la capacidad de sufrimiento de ambas sociedades no es la misma.
Es muy posible que esta guerra la gane Hamás si Israel no la acaba de un modo demoledor. Si Hamás resiste, habrá ganado una jugada estratégica, aunque hayan perdido centenares de víctimas civiles, pero eso es algo que Hamás no valora en exceso: su ideología es el martirio, eso lo sabemos por las frecuentes autoinmolaciones que llevan a cabo los yihadistas para despertar en el paraíso.
Un conflicto diabólico.
Agradezco tu honestidad y estoy de acuerdo con lo que dices, la estrategia de Hamas es abyecta. Yo espero que no gane ninguno, es decir, que ambos se den cuenta de que tienen que negociar. Cuando ambos bandos empezaron conversaciones en los 90 fue la mejor oportunidad que tuvieron de llegar a la paz.
EliminarCreo que hay que separar lo que hace la cúpula que está en el poder y dirige un Estado y el resto de la población. No todos los judíos comparten las decisiones del gobierno, no se puede generalizar de forma tan absurda porque entonces se cae en lo mismo que se crítica: el odio y la intolerancia.
ResponderEliminarEsto es lo que yo presiento en la intensa campaña a favor de los palestinos en España: una saña muy superior a cualquier otro conflicto violento, que, por lo general, nos dejan bastante indiferentes. Pero en este caso, hay una agresividad latente muy fuerte en los comentarios que leo en las redes sociales. ¿Por qué tanto silencio en la guerra de siria donde murieron más de once mil niños sobre un total de doscientos mil muertos y dos millones de refugiados? Nadie me ha respondido a esto. ¿Por qué en este caso, rápidamente se acude a la idea de genocidio cuando no se utilizó anteriormente en un conflicto que ha devastado un país que está ahí al lado? ¿No te huele a que ahí hay algo más? Porque no me creo que los españoles sean tan solidarios en un caso y tan indiferentes en otros. Hay un factor que no voy a mencionar pero que es evidente.
EliminarPersonalmente no creo que nadie se especialmente diferente por nacer de una familia judia, musulmana o cristiana, es la educación, el ambiente lo que genera identidades. O sea que para mi es algo añadido después lo que genera unas actitudes peculiares.
ResponderEliminarEl pueblo judío ha sido masacrado a través de la historia, sinceramente no sé exactamente por qué ni hasta que punto la "identidad judía" como pueblo aparte, como pueblo ·elegido" ha podido favorecer esos odios. Tras el holocausto en la segunda guerra mundial es comprensible que tenga un miedo que le obligue a tener una actitud defensiva, de "gatillo fácil" "La persona más peligrosa es una que este llena de miedo; Esa es a la que hay que temerle más" - Lidwig Borne
Otro pueblo que sufrió otro holocausto, al menos comparable es el armenio, a manos de los turcos a principios del siglo XX. Me llama la atención que de este holocausto se hable tan poco. ¿Por qué puede ser?
Lo que me molesta es que cuando se critican actitudes de Israel, sea tan fácil ser acusado de antisemitismo, (los árabes también son pueblos semitas).
Es cierto que muchos judios compraron tierras en Palestina. También es cierto que a veces estas compras fueron favorecidas por acciones terroristas de grupos radicales sionistas, que "explicaban de forma elocuente"a los propietarios árabes las ventajas que tendrían para ellos la venta de sus terrenos a los judios.
También es verdad que a causa de la inmigración Israel necesita más terrenos que son literalmente expoliados a los palestinos y ésto no es el mejor método para hacer amistad con los vecinos.
Personalmente conozco bastante la zona y tengo amigos árabes y palestinos, (que también tienen sus defectos) y por tanto en este caso me cuesta mucho ser imparcial.
Durante bastante tiempo judios y árabes convivieron razonablemente bien en la misma tierra. Creo que es a partir de la creación de un estado de Israel, impuesto por potencias que no vivían allí y el posterior expansionismo de este estado y la limpieza étnica lo que ha generado tanto odio que ya casi es genético en ambas comunidades.
La base para que las cosas estén como están es el presunto derecho ade Israel a ser dueña de su tierra por un mandato de Yaveh...y la verdad que como base no me parece muy consistente eso sí algo antiguo. ¿Quién tiene más derechos a dominar esa tierra?
Lo que si tengo claro es que la presente acción de Israel en Gaza no servirá para solucionar el problema, aunque a lo mejor se trata de eso.
¿Tienen que ver algo los yacimientos de gas frente a Gaza? http://www.globalresearch.ca/war-and-natural-gas-the-israeli-invasion-and-gaza-s-offshore-gas-fields/11680
Un abrazo
j
Lo que dices es interesante al principio sobre que no es la sangre la que genera identidades sino la educación y el ambiente.
EliminarPensemos sobre ello. ¿Crees que la predisposición a la inteligencia es un rasgo adquirido o genético? ¿Cómo es posible la enorme cantidad de genios judíos en todos los ámbitos? La educación puede tener su influencia, es cierto. Ser judío en la educación marca poderosamente, pero hay algo más, pero no está bien decirlo.
Hay una película reciente El hijo del otro en que una familia judía con un padre oficial del ejérctio israelí que descubren que su hijo fue cambiado en el momento del nacimiento y fue educado por una familia palestina. Del mismo modo, su querido hijo, es en realidad palestino. Es un tema ya conocido, pero que en este caso presenta un desarrollo muy interesante, pues ambas familias han de conocerse y aceptar que son lo que han sido en la educación pero también lo otro cuando antes se detestaban. En esta película se defiende precisamente la idea de que el judaísmo o el islamismo es una cuestión al cien por cien educativa.
Puedo entender el miedo de los judíos a todo lo que les rodea. Ellos son los elegidos y el resto son gentiles, aunque muchos judíos han sido educados fuera del pensamiento religioso. Ellos son siempre distintos, y, por mucho que hayan intentado asimilarse (Europa Central, Rusia, Este de Europa...) al final han sido judíos y no alemanes o austriacos o checos como creían ser. El drama del pueblo judío es tan interesante como estremecedor, y puedo entender su miedo, su terror a ser asesinados si triunfan sus infinitos enemigos en tierra totalmente hostil, porque allí donde están pocos hay que no ansíen su desaparición, haciendo uso de esvásticas para recordarles lo que les pasará tarde o temprano.
He oído una cadena de televisión árabe que mantiene que los primeros que están interesados en el aplastamiento de Hamás son los árabes de alrededor. De hecho, Mahmoud Abbas, apenas ha salido en defensa de la franja de Gaza, y la respuesta árabe ha pasado totalmente desapercibida, no sé si es que ha sido tímida o que ni siquiera ha existido.
Hamás es proiraní. El Oriente Medio es un avispero, un nido de serpientes, y desde aquí me parece que queremos verlo en tecnicolor con películas de malos y buenos simplificando todo para hacer bien la digestión y dormir bien la siesta. Creo que no sabemos ni una mínima parte de lo que pasa allí. Toda la información está mediatizada en un sentido u otro.
Hace tres días paseaba por el barrio judío de París y observé que estaba tomado por los antidisturbios. ¿Te imaginas por qué?
Creo que sabemos muy poco, pero sí que se cree con aparente fundamento quiénes son los malos y los buenos. Esto me inquieta. Todo es marketing. Y sí, hay antisemitismo en España. No hay que rascar demasiado para que surjan en opiniones de universitarios que los judíos controlan el mundo y de ahí una hostilidad muy cierta que se quiere disfrazar de actitudes propalestinas. ¿Por qué no nos identificamos con los tibetanos que sufren una situación muy semejante o peor? Y quien dice tibetanos, puede extenderse a muchos otros conflictos.
Un abrazo, un placer departir sin estereotipos.
Tienes mucha razón. El problema es muy complejo y tenemos la mala costumbre de analizarlo desde nuestro punto de vista, ( ¡tan lejano! ) y con ese ansia de simplificar todo que tenemos y etiquetar todo como buenos o malo (una costumbre que posiblemente nos hayan transmitido las películas y la propaganda política). El mundo no es blanco y negro, hay muchas gamas de grises.Una foto reducida a blancos y negros nos da una información demasiado reducida sobre el objeto o la persona, es solo cuando metemos los grises ,(no digamos el color), que somo capaces de hacernos una idea más completa y ajustada a la realidad, (suponiendo que sólo haya una realidad, que es mucho suponer. Pero tenemos una especie de pereza mental en pasar del blanco y negro a los grises, tal vez porque esa ampliación de la información nos desbarata la imagen preconcebida que tenemos de ella. El ojo tiene un punto ciego.Cuando miramos una escena, hay zonas que no vemos por esa razón. Sin embargo en la imagen que se forma en el cerebro no falta nada. Es el cerebro el que "termina" la escena de forma que sea más o menos congruente con lo que sí vemos. Eso ya es suficiente para que seamos consciente de que las cosas no siempre son como nos parecen... ¡pero cuesta tanto admitirlo!
EliminarUn abrazo
j
Los peligros de la simplificación están a la vista: el modo como, casi imperceptiblemente, una manifestación antiisraelí se convierte en antisemita y se acaban incendiando sinagogas o asesinando a quien entre en ellas, como pasó hace poco en Francia. Aunque Israel es un estado democrático, no es menos cierto que tiene comportamiento teocráticos que no lo distinguen fácilmente de otros estados vecinos, como Irán, Irak, o como la propia franja de Gaza. La posición de al Fatah, que tú señalas, es bien curiosa, porque todas sus manifestaciones parecen protocolarias, y tampoco parecen volcarse con los damnificados de la franja teocrática de Gaza, como si esperaran, de una vez por todas, que Israel acabe con ellos para poder "ocuparla" políticamente y negociar, entonces, una paz duradera con Israel desde el reconocimiento mutuo entre estados, el palestino y el israelí. Creo que el reconocimiento a todos los efectos del estado de Palestina, el gobernado por Al Fatah, marginando a Hamás, sería una medida de presión estupenda para que Israel reconsiderara su política expansiva y genocida, porque así ha e denominarse al asesinato indiscriminado de civiles en tan gran número..
ResponderEliminarRespecto del fondo de la cuestión, el judío representa la "diferencia", la "alteridad" frente al arraigo del nativo. Por otro lado, su política tradicional de no mezclarse con "infieles", al menos los religiosos, los ha convertido en chivo expiatorio. No está de más recordar que el infame libro Los protocolos de los Sabios de Sión, escrito por la policía de la Rusia de los zares fue un auténtico best-seller en Europa y casi todo el mundo, aunque intelectualment cueste creer que eso haya sido así.
Esa fina línea, como bien dices, que separa lo antigobierno de Israel, antiisraelí a antisemita, se ve perceptiblemente en los mensajes que circulan por Facebook. Se pasa de lo uno a lo otro inconscientemente. Y este sentimiento propalestino, loable y humanitario, no surge en otras causas igualmente merecedoras de generosidad. Así que no hay que dar por supuesto que toda crítica al gobierno de Israel sea portadora de antisemitismo, pero buena parte de esos ataques llenos de ira tremenda no me los puedo explicar sino es por un antisemitismo larvado, subterráneo, que sale fácilmente. La intensidad del sentimiento propalestino no se explica solamente por la imagen del débil frente al fuerte. No. De esas situaciones el mundo y la realidad están llenas y no provocan esos accesos de ira y de solidaridad. Hay algo más que solo se explica por el rencor profundo hacia la realidad judía auque por activa y por pasiva se intente negar diciendo que solo es hacia una política represiva del gobierno israelí. Masacres hay muchas desgraciadamente, pero solo he visto en esta una movilización en las redes sociales con una intensidad fortísima. Hoy la portada de El Periódico de Cataluña era expresiva de ese estado (y de la mercadotecnia, claro).
EliminarNo sé muy bien de qué va Los Protocolos de los Sabios de Sión.
Mañana salgo a recorrer el Camino de Santiago Norte y estaré un par de semanas alejado de internet. Nos encontramos a la vuelta.
Sé poco más o menos lo mismo que tú, la historia de España y los judíos, el Holocausto -aquella serie de televisión de mi infancia que luego verificaría en los libros de historia-, el conflicto con Palestina. He oído hablar a los judíos de Israel de defensa propia, de eliminar el terrorismo, pero a mí me parece totalmente desmesurado, por no hablar de la apropiación de unas tierras bajo dudosa legalidad. Me temo que todo es una cuestión de intereses, políticos, económicos o estratégicos. Si en lugar de Palestina fuese Arabia saudí, otro gallo les cantaría. Mientras tanto, siguen muriendo niños a decenas, en un goteo que recuerda aquel no tan lejano holocausto.
ResponderEliminarEs terrible lo que está pasando allí pero no es equiparable a la maldad del Holocausto que se basaba en una planificación minuciosa de los procesos de transporte, concentración y selección de los prisioneros para terminar en las cámaras de gas o fallecer por causa de la desnutrición y las enfermedades. Por lo que sé, las tropas israelíes han entrado en Gaza y están muriendo también, en menor proporción, eso es cierto. En este caso los prisioneros pueden resistir y lanzar misiles contra las ciudades de los carceleros. La desproporción es notoria, es cierto. ¿Qué sería mejor? ¿Mil muertos palestinos por mil muertos israelíes? Entonces el conflicto sería de otro tipo, tal vez a muerte total. La carnicería sería todavía mucho mayor, infinitamente mayor. Lo que hace que la comunidad internacional intente tímidamente el final del conflicto es precisamente la desproporción, y la base pacifista de occidente se posiciona por el más débil. No deja de ser esto una jugada estratégica en manos de Hamás. Los débiles también tienen sus armas como estamos viendo. Nunca hay que subestimar el poder de los supuestos débiles.
EliminarMe parece realmente complicado el tema. Si hablamos de este conflicto y no de otros es porque nos lo ponen encima de la mesa, todos los días, en la prensa y en la tele. A todas horas. El tratamiento de otros conflictos no es el mismo en este sentido, ni existen para la opinión pública. Ignoro el porqué.
ResponderEliminarDe acuerdo con la cuestión de las simplificaciones y del error de tomar en todo en lugar de las partes, no todos los judíos apoyan lo que hace su gobierno y su ejército y así lo manifiestan por activa y por pasiva también en los medios. Lo que nos hace tomar partido es la diferencia de fuerzas, del fuerte contra el débil.
Cuando se creó el estado de Israel, este tardó muy poco en hacerse con un ejército poderoso. Entiendo que se sienta amenazado por los países árabes y ese ejército pueda ser un elemento disuasorio frente a posibles enemigos, el problema es que lo está utilizando contra los palestinos, situación que ha repetido sistemáticamente a lo largo de los años y que le ha resultado siempre beneficiosa. No sé quién dijo aquello de que la guerra es un paso más a la hora de hacer política y creo que eso es lo que está haciendo Israel en esos momentos.
A mí lo que realmente me choca es que ningún organismo internacional sea capaz de mediar en el conflicto, o quizá no se quiere que así sea.
Entiendo que al pueblo de Israel le tocaron profundamente su dignidad cuando le condenaron a vagar por el mundo. Se ejerció con ellos una violencia brutal y aprendieron a tener miedo. Es curioso como esa violencia que vivieron en sus carnes es proyectada después sobre otro pueblo más débil.
Seguimos en la misma línea de siglos anteriores dando prioridad a los territorios sobre las personas. No aprenderemos nunca.
Besos.
Angie, hemos pasado tres años seguidos con noticias terribles sobre Siria en cada telediario. Las brutales matanzas de Hafed El Assad contra la población civil han sido mucho más letales que el conflicto de Gaza. Se calcula que han muerto más de once mil niños de los que ha habido fotos estremecedoras, además de doscientos mil muertos en total y dos millones de refugiados. Sin embargo este conflicto no ha movilizado a la parte humanitaria de la sociedad porque allí no era fácil decir quién era el malo o no era tan fácil como aquí en que se elige al más fuerte que de paso es judío. Aquí es donde existen mis dudas sobre la tendenciosidad de los más solidarios con la causa palestina. Aquí un factor determinante es la desproporción entre los dos contendientes.
EliminarPido, personalmente, un alto el fuego, un decir basta ya a la guerra, sabiendo que las dos partes tienen razones y muy sólidas. Me gustaría que la ONU, los EEUU y la UE pidieran a los dos que cesaran sus ataques mutuos, pero no me siento unido a los que condenan moralmente al estado de Israel sin paliativos porque sé que, en el fondo, existe un profundo e inconsciente antisemitismo en sus posturas sin matices.
No aprenderemos nunca, eso es cierto. La historia de la humanidad es la historia de la violencia, es consustancial a ella. Todo son conflictos para conseguir, por la aniquilación del contrario, nuevos equilibrios geoestratégicos.
Besos.
La revista The Lancet, la más relevante entre las publicaciones médicas, acaba de publicar una carta firmada por científicos y médicos, en su mayoría italianos y británicos. Todos han trabajado en algún momento de su carrera en los territorios palestinos. Incluso los hay a los que la invasión de Gaza les ha cogido allí.
ResponderEliminarMe hubiera gustado conocer ese documento. ¿No puedes enlazarlo? Sé que MSF está trabajando allí y ha emitido algún comunicado al respecto. También había españoles que han salido urgentemente de Gaza.
EliminarPinchando en el anterior Miguel, te llevará al enlace de Cuarto Poder, y allí tendrás otros enlaces para acceder a The Lancet.
ResponderEliminarPinchando este segundo Miguel, te enlazará directamente con la carta abierta en Inglés
Lo he leído. Me parece muy importante que den un testimonio de la realidad que ocurre.
EliminarMe cuesta mucho entender todo este conflicto. Toda la historia que han vivido... lo que sucede hoy para mi sigue siendo inexplicable.
ResponderEliminarSaludos Muy buen blog Joselu
Carlos
He escrito reiteradamente sobre el tema a lo largo de nueve años. Son varios los artículos que han aparecido. Es algo que me ha interesado mucho, y, por más que lo intento no puedo encontrar una solución fácil a un problema que es inextricable. Quizás hay muchos que lo resuelven con una condena sin paliativos de Israel y se van con la conciencia tranquila. Yo no busco tranquilizar mi conciencia porque sé que está también implicada y soy parte de este mundo infinitamente complejo en el que no se puede mover una pieza sin alterar el conjunto. Fíjate que fue un patriota el que disparó contra el heredero del imperio austrohúngaro, y lo que desató. En el mundo se producen reacciones en cadena complejísimas. No sé, como cirujano, dónde metería el bisturí. No lo sé. No tengo ninguna solución, me uno a ti. Tiene explicaciones pero no soluciones. Saludos, Carlos.
EliminarGracias a ti por responder. Concuerdo con lo que dices.
EliminarSaludos
Carlos
En cierta medida me ha sonado esta entrada a que lo que esta haciendo isreal tiene alguna justifiquicación. Y desde mi punto de vista no hay nada en este mundo que justifique lo que esta haciendo israel con el pueblo palestino, es simplemente inhumano, cruel y no tiene nombre. Y la complicidad de estados unidos en repugnante.
ResponderEliminarCasi pides un imposible, hacer un psicoanálisis al pueblo judío cuando semejante práctica fue inventado por ellos posiblemente por ser judíos necesitados de un psicoanálisis.
ResponderEliminar¿Por que las civilizaciones egipcia, mesopotámica o griega fue tan extraordinarias habiendo nacido en zonas geográficas tan hostiles? Quizás porque había que sobrevivir y discurrir para no morir.
Los judíos fueron y son un pueblo con una personalidad muy fuerte en un entorno muy hostil, tenían que proteger su espacio para no sucumbir ante vecinos muy poderosos. ¿Por qué tenían esa personalidad tan fuerte? Ellos no tenían tecnología, ni grandes ejércitos, pero tenían un dios único que según sus creencias los consideraba el pueblo elegido y eso debe ser muy estimulante. Algo parecido a lo que hacen los entrenadores de cualquier deporte cuando le dicen a sis chicos a punto de enfrentarse a un rival más poderoso aquello de : “Sois los mejores. Si queréis nadie podrá con vosotros” Y tal cual, en las mayores adversidades los judíos han sabido salir a flote. Acostumbrados a vivir a tantos miles de metros de altura les sobra aire a nivel del mar.
Por otro lado, es absurdo identificar Israel con pueblo judío y los intereses territoriales de una etnia sobre los intereses de una estado que fue puesto allí como un enclave occidental en el corazón del mundo árabe. Y es que la historia no es reversible, si nos parece grotesco que los yihadistas reclamen Al Andalus, quinientos años después, es grotesco que se olviden casi 2000 años de historia en Palestina. Que los que hay ahora por allá no nos molan. Que son moracos. Patibularios. Llevan barba y creen en Alá, que también tiene orígenes judíos. Y no son guapos occidentales que hacen bonito en las películas de Hollywood. Pero no puedo matarlos. No puedo matarlos cuando juegan al fútbol, cuando están en los hospitales o cuando están en los colegios al parecer no tan protegidos de la ONU. No puedo matarlos en nombre de lo mucho que nos han puteado a nosotros antes. Eso sería hacer como el niño que es castigado por sus padres y luego pega a su hermano pequeño en venganza. No es justo, es una putada y toda la brillante historia intelectual y humana de los judíos no puede justificar este Holocausto Siglo XXI, como toda la ilustre cultura alemana puede justificar el Holocausto del siglo XX. Prefiero ser ecuánime y pensar que una cosa es Israel y otra el pueblo judío y que me gusta éste tanto como me disgustan las prácticas sangrientas de aquel.
Un abrazo
Primero un inciso que creo importante, coge a todas las personas de las ciudades de Barcelona 1 620 943, los 3, 207 247 de madrileños, 797.028 de Valencia, 351.629 de Bilbao, les sumas Burgos, Palencia, Vitoria y Bayadoliz, detienes a todos sus habitantes hombres, mujeres y niños, les robas sus pertenencias, les metes en vagones como ganado, les esclavizas y luego les gaseas de forma industrial asesinando a todos ellos y quemando en hornos industriales sus cuerpos y dejando todas estas ciudades vacías de personas, eso es un holocausto. Cualquier comparación de estos hechos con lo que hace Israel en la actualidad me parece un insulto a la verdad y una frivolizacion del termino nazi que no merece más explicación.
ResponderEliminarIsrael lucha por su supervivencia y debe elegir entre que mueran sus inocentes o que mueran los inocentes de al lado que son usados como vergonzosos escudos humanos, ¿que haríamos nosotros en su caso? me parece una pregunta adecuada a la que no sabría contestar.
Entrevista a Lee Gargaliano y Liliana Cordova-Kaczerginski
EliminarEntrevista a Lee Gargaliano y Liliana Cordova-Kaczerginski
EliminarJoselu, a riesgo de que me malinterpreten lo diré claro. Si revisamos aunque sea someramente la biblia vemos que el pueblo judio está cada dos por tres masacrando "por orden divina" otro pueblo o nación. Pero también vemos que a lo largo de la historia no ha habido imperio o pueblo más poderoso que no les haya arreado a gusto. A partir de Tito y Dicocleciano la cosa fue a mayores porque se repartieron por el mundo y les arrearon a placer. Y la pregunta sale sola. ¿Si todo el mundo les arrea, es que todo el mundo es malo o los malos son ellos? Su diáspora fue general pero general fue siempre su autoexclusión de las sociedades donde vivian y ahí puede que esté la razón de todos los males. Ahora mismo tienes por ejemplo que en el Ejercito Israelita buena parte de sus miembros no son "Ciudadanos Israelitas, ciudadanos del Estado de Israel" son jóvenes judios de cualquier parte del mundo que van a defender un Estado creado con unos argumentos que si los empleásemos nosotros podríamos reivindicar América entera o si lo hacen los Italianos podrían reclamar Hispania enterita, Me temo que la única opción posible es que todos ACEPTEN LA RESOLUCIÓN DE NACIONES UNIDAS repartiendo el territorio y que los Judios acaten por las buenas ese reparto, porque si no es por las buenas me temos que tarde o temprano no quedará nadie para contarlo porque el personal está tan hasta los huevos que si puden van a soltar un bombazo nuclear que lo mande todo al carajo ¿Y despues? No me creo la historia de sión ni la de nadie que se crea enviado por los dioses. En todos los ejercirtos del mundo está la misma leyenda :"Dios está con nosotros". y NO Creo que dios esté con nadie, más bien ni creo en Dios. En lo que si creo es en la inocencia segada de tanto niño inocente y en que si acogotas a un pueblo hasta el extremo, se revolverá y si puede te morderá la yugular.
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