He estado en la cabalgata de los Reyes Magos en la plaza Cataluña de Barcelona. Ha sido una simulación efectista, con muchas luces. Representa la visión bienpensante de nuestra sociedad. No han faltado las referencias a otras culturas como la africana con una colección de personajes-máscaras con claro aire negroafricano. Es lo que más me ha gustado, pero todo tenía para mí una impresión de fabulación infantil que me sumía en una cierta tristeza y esperaba que todo se acabara ya. La presencia de la guardia urbana a caballo, caravanas de periódicos deportivos, camellos de pega y alguno de verdad me sumían en el aburrimiento. Más con las máquinas limpiadoras que dejan la ciudad impoluta tras el desfile. Todo ha de quedar igual, qué poca alma tiene el pensamiento progresista. Todo perfecto pero perfectamente impostado.
Mi pensamiento durante la cabalgata se me iba a Gaza. ¿Quién hablaba de la tragedia que allí se está desarrollando? Una tragedia clásica con dos actores que juegan una representación terrible. Hamás y el ejército hebreo. ¿Quién es la víctima y quién el verdugo? Parece una pregunta retórica cuando vemos la proporción de fuerzas que se enfrentan. Uno de los ejércitos más poderosos del mundo con armamente sofisticado, y una ciudad que se enfrenta a ellos con piedras y algunas armas. ¿Quién tiene más miedo? Según el pensamiento oriental, el que ataca es el que tiene más miedo. En este caso, es el estado de Israel. Los cohetes ininterrumpidos de Hamás llenan de miedo a los ciudadanos hebreos. Tienen poca fuerza, pero les hace sentirse vulnerables a pesar de su gran poder militar y tecnológico. Israel tiene miedo, mucho miedo. Vive en medio de un mar musulmán que le odia, los odian, todos los países que lo rodean desearían su desaparición. Israel es un error de la historia. Lo saben y conocen la tragedia del pueblo palestino, no menor a la suya. Pero no pueden volver atrás porque detrás no hay nada. Prefieren inspirar terror en todos los países que les rodean a ser amados, porque nunca lo serán. Los judíos saben que estén donde estén serán odiados. Es la maldición de su pueblo. Anhelan que esta guerra rompa la columna vertebral de Hamás. ¿Pero lo lograrán? En muchos sentidos es una guerra poética. En el mundo, Israel no suscita simpatías, en España muy pocas. Esta guerra la van a perder porque van a generar un odio tremendo, y no van a poder destruir a Hamás, que se alimenta de la ideología del martirio. Les gustan los mártires, y en esta historia ellos representan como nadie la figura del sufrimiento.
Hubo un momento extraordinario cuando Isaac Rabin estableció un plan de paz con el movimiento laico palestino liderado por Yaser Arafat. Un fanático judío asesinó a Isaac Rabin y con él se acabó la posibilidad de un arreglo pacífico. Vino luego el psicópata de Ariel Sharon y se levantaron muros de la vergüenza. Palestina no puede subsistir en esas condiciones de ocupación y opresión. Hamás es la explosión de ese odio. Es un movimiento reaccionario, fundamentalista, inspirado en la teocracia iraní. No me produce ninguna simpatía. Es una lástima que la política en el oriente medio esté determinada por el miedo y por el odio. Hay cantidades ingentes de ellos. Entiendo el miedo judío y el odio palestino. No veo solución, pero esta guerra no contribuirá a mitigar el pánico de Israel, e incrementará el odio en cantidades terroríficas. Un gran fracaso del mundo, un fracaso de Israel, un fracaso de los palestinos… Una ópera bufa profundamente trágica que no tiene solución.
Tremenda imagen. Es verdad: no tiene solución. En fin... .
ResponderEliminarLa foto es tremenda. Otra vez la violencia extrema, el despropósito de los seres humanos masacrando a otros seres humanos. A mí tampoco se me va de la cabeza. Ya he preparado la mesa del comedor con los Reyes para mis niños, que vendrán mañana a recogerlos, con su chocolate y su roscón, y por detrás de la ilusión me aparecía una y otra vez la imagen de los niños de Gaza, las terribles fotos que vemos en la prensa, los relatos que nos llegan. Esto no puede continuar. Están generando demasiado odio en todo el mundo.
ResponderEliminarComparto tu análisis, o mejor tu visión, tu impresión. Oí, o leí en algún sitio, que se barajaron tres posibilidades para ubicar el estado de Israel, una donde está, en esa maldita tierra santa de tantas religiones, que ojala quedase alguna vez arrasada sin que quedase de ella piedra sobre piedra, otra en algún lugar de Argentina, y otra en el sur de Sepharad. Es hacer ucronía, pero... Esa comunidad representada por el estado sionista aprendió el mal de sus verdugos, y lo ejerce despiadadamente contra aquellos a los que les ha tocado ser sus enemigos.
ResponderEliminarDolorosa imagen...y lo peor..que es real!!!que tristeza...gracias por ser tan involucrado!
ResponderEliminarUn saludo
Ese eje en el que gira el miedo y el odio es un punto de meditación vertiginoso, repulsivo. Me gustaría, como en otras cosas, que a los niños se les ofreciera algo de lo mucho que hay entre la guerra y la náusea de la cabalgata.
ResponderEliminarCreo que siempre va a haber judíos, aunque solo sea porque ser judío es una especie de prodigio, no una condición de superioridad, ni inferioridad, sino más bien una condición de civilizado, de ser un extraño, de tener el punto de vista del extraño, de manera que los que son judíos ven con claridad porqué son aparte. El mundo necesita de estos extraños, judíos o no. Ser judío –y también ser cualquier otra cosa dentro de la familia humana- es una clase especial de experiencia .... La humanidad tendrá que acostumbrarse a que los judíos han venido aquí a quedarse, y una vez que se relaje la controversia, podrá disfrutar de su compañía.
ResponderEliminarHoward Fast. Los Judíos. Historia de un pueblo.
Estupenda entrada.
ResponderEliminarMala solución le veo a esa guerra, las noticias dan una sensación de cosa ya vista que amenaza con insensibilizarnos a todos.
Magnífico análisis, Joselu, mucho más claro y lúcido que los que se leen u oyen por ahí. Siendo realistas es difícil ver la solución a este conflicto enquistado. Nadie tiene la fuerza moral capaz de encontrar una solución válida para todos, a la fuerza alguien, quizá todos, tienen que perder algo que consideran les pertenece. Israel ha respondido de forma desproporcionada a las provocaciones de Hamás, han muerto cientos de palestinos, entre ellos muchos niños, y los atacantes se defienden con la excusa de que entre ellos se ocultaban los terroristas. ¿Quién es más terrorista? ¿El miedo israelí justifica tanta barbarie? No lo entiendo, quizá porque no lo vivo de cerca. Me llegan las noticias y las imágenes y puedo pedir paz, como otros muchos, pero, ¿de qué sirve? ¿Quién puede parar esto?
ResponderEliminarUn abrazo, colega.
Antonio, la imagen nos devuelve el dolor de los demás. Susan Sontag nos dice que cuando vemos una imagen terrible, en el fondo pensamos qué bien que no me haya tocado a mí, y seguimos viviendo. Es normal. Me asombra que nuestra guerra civil movilizara tantas conciencias y muchos de ellos vinieron a combatir en España. Fueron las brigadas internacionales. En aquel tiempo la conciencia mundial estaba menos embotada, menos saciada.
ResponderEliminarClares, es un laberinto y no tiene fácil salida. El pueblo de Israel tiene una historia terrible, pero la suya se ha superpuesto a la del pueblo palestino. Son dos naciones, dos proyectos luchando por su propia concepción del mundo. Ambos suscitan simpatías en mí, pero ello es incompatible porque la tierra es una. No sé bien que decir.
Pantagruel, yo en el fondo simpatizo con el destino judío. Preferiría mil veces convivir con una comunidad judía que una comunidad de Hamás. El pueblo judío es occidental, pero nunca han dejado de ser perseguidos, en todos los países. Entiendo cómo se aferran a la tierra bíblica, pero a la vez veo que se comportan como sus exterminadores en el holocausto. No veo solución. Quizás no la tiene y es una cuestión de fuerza como ahora intentan demostrar con su invasión de Gaza. Pero no veo que puedan ganar. Hay quien dice que todo es una trampa de Hamás. Saldrán perdiendo. No siempre el que más mata es el que gana. En el Líbano salieron derrotados por Hezbolá, a pesar de que mataron más que nadie.
Carmensabes, la imagen está extraída de internet, no faltan las imágenes impactantes. Seleccioné está porque muestra lo contrario de mis simpatías ideológicas.
Aaoiue, la espiral odio-miedo es infinita. No tiene salida. Todos son víctimas en esta guerra. Todos tienen su pasado y sus razones. Todos también se equivocan, pero qué fácil es decirlo cuando estás fuera.
Serenus, una vez intenté hacer un cómputo de artistas, científicos, filósofos, cineastas, psicólogos, economistas... judíos y mi lista no tenía fin. Representan el pensamiento en su vertiente más densa dentro del orbe occidental. Marx, Freud, Einstein, Woody Allen... Siento una enorme ternura por su realidad y su historia, pero, pero... cuando disparan contra niños, contra mujeres indefensas y ni siquiera quieren tomar en consideración lo de bajas colaterales, me llena de dolor y de incomprensión. Están aquí afortunadamente para quedarse, pero todavía no han encontrado su lugar en la historia. La suya está entretejida con la del pueblo palestino y es incompatible. ¡Terrible dolor y sensación de que el conflicto es insoluble!
Frikosal, el riesgo de todo esto, como dices, es la insensibilidad. Todo lo que tiene como protagonista a los judíos tiene un enorme morbo. Existe la tragedia del pueblo kurdo, la del pueblo tibetano, la de tantas tribus en el amazonas o los conflictos en África, pero todo lo que tiene como eje a los judíos es doblemente impactante. Siento simpatía por ellos, la sentí en la guerra de los seis días cuando era niño, y la sigo sintiendo ahora, pero no puedo dejar de atender a la terrible tragedia de los palestinos. Estoy dividido. No puedo condenar a unos y salvar a otros.
Yolanda, ¿quién puede parar esto? Espero que el presidente Obama que está a punto de llegar añada algunos nuevos puntos de vista a esta tragedia. Clinton reunió a Arafat y a Isaac Rabin para firmar un protocolo de paz. Los fanáticos judíos son tan peligrosos como los exaltados de Hamás, quizás más porque tienen más poder. Asesinaron a Rabin. Hay entre los judíos a muchos médicos y cooperantes que ayudan a los palestinos. En Israel hay voces discordantes aunque no se las oiga. Siento más cercana la sociedad israelí, la de Tel a Viv, más que la de Jerusalem, que la de Gaza, pero no puedo dejar de pensar en su tragedia. ¿Quién lo puede parar? Espero que el nuevo presidente americano nos sorprenda, aunque lo dudo por la profundidad del odio que está enraizado en la sociedad palestina y el miedo de la judía.
Mucha gente lo pagará, pero esto, como todo, se solucionará. Lo que pasa que ese conflicto sólo hará cambiar de nombre. Y de nuevo otros pagarán (siempre los mismos) y de nuevo otro nombre de guerra.
ResponderEliminar"No importa qué ideología o posición política tengas, todos coincidimos en algo, queremos Paz"
ResponderEliminar... siento tanto creer que Ghandi se equivocaba comprobando una vez más, que imágenes como ésta tengan lugar a ser...
Personalmente no lo entiendo, lo intento pero no puedo, no lo consigo. Angustioso. Es la sinrazón, o soy yo, o somos nosotros, muchos, pero por lo visto no los suficientes.
No sé... a veces pienso que la capacidad de sufrir del ser humano es ilimitada. Brutal (...)
¿Algún día acabará? Sí, acabará. Siempre queremos pensar en un final feliz, es la esperanza. Pero si quieres conocer el futuro, mira el presente, que es su causa. Negro. Más negro. Muy negro :´(
V.
Simalme, supongo que cuando te refieres a que pagarán los mismos quieres señalar a los palestinos.¿O es otra tu interpretación?
ResponderEliminarV, para apostar por la paz hace falta correr riesgos y estar dispuesto a perder. Si no se entiende así, el conflicto se enquista y se encamina a que no haya solución sino un eterno enfrentamiento. Por eso he hecho referencia al momento de Rabin y Arafat, que fue desvanecido por un exaltado judío que asesinó la esperanza.
Como me ocurrió con tu entrada sobre el terrorismo de ETA, me he vuelto a quedar mudo. Y esa asociación de ideas terrorismo ETA-Hamás me lleva a imaginar una ocupación militar del País Vasco, con bombardeos sobre la población civil, embargo económico y humanitario, etc. ¿Nos estamos volviendo locos?
ResponderEliminaruna verdadera pena... me quedo sin palabras y, en realidad, ya lo has dicho todo. No hay solución, ni tampoco se busca. Puede que en este caso incluso sea imposible encontrarla.
ResponderEliminarIba a escribir también sobre el tema de palestina en el blog personal, que por cierto, lo he retomado, ahora ya tengo menos trabajo. Mas ya lo has dicho todo.
Israel tiene miedo como dices, pero el mundo Arabe también. Ya perdieron una vez y no les volverá a pasar, pues no necesitan más mártires, ya tienen suficiente con los que mueren en Palestina. Por qué donde está el mundo Arabe, no se ha pronunciado y la UE que no da un palo al agua. Viven todos inmersos en la crisis del petroleo y Palestina es el hermano sin estado, el hermano sin petroleo, ni dinero, una buena cuna de mártires.
No tiene solución.
Acabo de 'colgar' mi 'post' diario y he venido a visitar tu bitácora cuando me encuentro tu comentario.
ResponderEliminarMe confieso impotente ante tanto desastre humano. Difiero algo de tu visión poética del conflicto porque es brutal y porque las víctimas no me dejan ver más allá de la repulsión que siento hacia quienes masacran inocentes, entre ellos los niños.
El argumento judío es absurdo. Es como si porque existe ETA hubiera que bombardear Euskadi para acabar con los terroristas.
Muy poco que añadir a tus reflexiones, me parece que has hecho un retrato de la situación en Oriente Medio sencillamente genial. Has puesto los puntos sobre las íes y leído esto, que cada palo aguante su vela. Yo, por mi parte, soy tremendamente pesimista, y lo soy por las razones que tú muy acertadamente apuntas. Sólo un resquicio, una esperanza: que la solución venga de fuera. De Europa, de USA, de la ONU. Si no median estas fuerzas ajenas al conflicto con buena fe, la situación va a seguir igual.
ResponderEliminarUn saludo.
Muy buen post Joselu.
ResponderEliminar¿Qué te parece la justificación que algunos medios españoles están haciendo de todo lo que pasa en Gaza? Me parece increíble la desvergüenza de algunos periodistas(?) de este país, que suelen ser a los que luego se les llena la boca con las palabras libertad y derecho a la vida.
Y no les hables del País Vasco, porque ese tema es suyo en exclusiva.
Saludos y enhorabuena por el artículo. Me encanta lo que dices sobre la poca alma del pensamiento progresista.
Estoy básicamente de acuerdo contigo, aunque la verdad es que yo no estoy ni mucho menos tan puesta en lo que a datos se refiere... Siempre se aprende por estos sitios, es lo que más me gusta de esta forma de relacionarnos.
ResponderEliminarCreo sinceramente que este conflicto no tiene solución inmediata ni mucho menos. Creo que hay intereses de alto standing en que esto no acabe...
La foto me ha impactado mucho. Los niños son los más perjudicados en todas estas historias. Sin saber realmente la razón, deben odiar a quienes ni conocen...
Un abrazo, Joselu y gracias por toda esta información.
Antonio, Franco es lo que hizo con el País Vasco y otros lugares de España. Entrar a sangre y fuego, masacrando a los sospechosos y premiando a los adeptos. El producto es el odio que reseño en mi post.
ResponderEliminarEloi, Palestina, como dices, no interesa tampoco a los países musulmanes. Los sirios masacraron a los refugiados palestinos, Egipto tiene mucho miedo a sus propios fundamentalistas, Líbano está totalmente dividido, Irak está al borde de la descomposición y la guerra civil en cuanto se vayan los americanos, los emiratos del golfo no tienen ningún interés en Palestina. Si el mundo árabe quisiera hacer algo por Palestina lo habría hecho. Siempre echamos una culpa justificada a Occidente pero en este caso la responsabilidad de la suerte del pueblo palestino está compartida. Entretanto Israel aplica la ley del talión para ser temido, pero también odiado. Prefieren ser odiados y temidos, antes que frágiles o débiles. Les da igual la condena internacional, muy débil por cierto.
Fmop, casi lamento haber incluido la palabra poético en mi post, pero apliqué a su redacción al visión de altura de la que hablaba Valle en su Visión estelar de la guerra en la media noche. Todo conflicto tiene sus raíces poéticas en la épica que tejen sus pueblos para justificar sus acciones. Palestina tiene su épica y sus poetas como Mahmud Darwish, recientemente muerto. También Israel tiene su visión poética de este conflicto. Se sienten perseguidos durante toda la historia y se aferran -incluso con el terrorismo más brutal- a su trozo de tierra que consideran naturalmente suya, olvidando el padecimiento del pueblo palestino. Los conflictos más terribles tienen sus orígenes poéticos y poseen su mística. La poesía es un arma muy poderosa, y detrás de las imágenes más bellas se esconde el horror. ¡Qué decir de la poesía que produjo el comunismo! ¡Y el propio fascismo! Todos los conflictos y guerras atroces han tenido sus poetas en la historia. Esta es mi explicación, que no sé si te bastará.
Miguel, el papel del presidente americano entrante será fundamental. Bill Clinton logró un tratado de paz, con sus limitaciones en Oslo en 1993. Arafat y Isaac Rabin se dieron la mano y buscaron una solución a una situación explosiva. El fascismo judío vino a enterrar esta vía. Espero que Obama no sea una vía muerta, y que se tome este asunto muy en serio no como el presidente saliente Bush que no ha hecho nada.
Sorel, he leído hoy La vanguardia y El País y veo muy tibia la condena de lo que está pasando. Se tiende a contemplar como un paisaje no por terrible menos inevitable. Hay una resignación total de la Unión Europea, y Estados Unidos está desaparecido, y los países árabes tampoco dicen mucho. Saludos, gracias por tus palabras. En cuanto a la falta de alma del pensamiento progresista, lo reafirmo. Es el pensamiento de lo políticamente correcto sin ningún riesgo. Y no es que me identifique con el pensamiento conservador o reaccionario, que tampoco. He asumido algunos aspectos importantes de mi reflexión sobre lo africano en que lo tradicional tiene una fuerza progresista enorme. En España la desaparición de la literatura en los planes de enseñanza o la desactivación progresista de la filosofía tienen mucho que ver con el pensamiento llamado progresista. Defender las humanidades es carca, según esta visión. Pero detesto igualmente a los reaccionarios. Es otro tipo de pensamiento el que echo a faltar.
Novicia Dalila, una viñeta de El Roto hace unas fechas ilustraba bien lo que pasa por la cabeza de Israel. Decía con la imagen de un borbardero arrojando bombas Es imposible ser a la vez David y Goliath sin acabar loco o Somos las víctimas de los que matamos. Creo que Israel necesita una buena dosis de diván del psiconalista y un castigo internacional explícito y claro.
En la última entrada de mi blog, que también trata este tema, una persona (no digo su nombre porque firma como Anónimo, simplemente) ha comentado a favor de Israel.
ResponderEliminarNo sé qué clase de Historia habrá leído él/ella y todos los que apoyan el sionismo, pero me parece una idea puramente sectarie que en un determinado momento de la Historia fue escuchado y atendido pero que no tiene cabida en la concepción actual del mundo. Atrás quedaron los linajes que buscaban sus tronos y las tierras prometidas.
Por supuesto, esto es ejemplo de que la política y la religión juntas son peor que los hermanos Kazynscki. En fin, qué decir, otra historia interminable.
Quien mal empieza, mal acaba, pero Israel no empezó mal, empezó con una ficción en una tierra donde no había un poder sino tribus teocráticas luchando entre sí. Ese panorama no ha cambiado 90 ó 60 años después, pues los países árabes o no saben o no quieren adoptar el sistema menos malo de gobierno que es la democracia. Israel es el único punto que la representa en Oriente Próximo, a costa de dinero estadounidense y efectivamente el ejército mejor preparado.
ResponderEliminarEste ha sido un gran paso atrás de Israel desde que en 2005 liberaron la franja de Gaza.
Saludos Joselu, siento que tuvieras ea tarde desapacible en el alma.
Jose, el lanzador de botellas, he leído las intervenciones de Anónimo en tu blog y sin duda están trazadas con trazos gruesos, sin ninguna finura, con una gran prepotencia. Si ese es el espíritu que reina en Israel, mal se podrá solucionar el problema palestino. Tiendo a pensar que la situación geopolítica en Oriente Medio se mueve exclusivamente por una cuestión de poder. Quién tiene más poder para imponerse a los demás. Los argumentos son secundarios. Israel no parece querer ser estimado, sí temido, y ésta parece la suprema directriz de sus acciones. No sé si es pecar de ingenuidad pensar que podría ser de otra manera. No lo sé, francamente.
ResponderEliminarZinquirilla, no fue una tarde desapacible en el alma, porque veía a mis hijas, especialmente a la pequeña, disfrutando de la cabalgata. Quizás ésta fuera de la única forma que pueda ser. Y dentro de lo que cabe fue variada. Quizás es que estoy dentro de los rituales africanos en mi cabeza, y esperaba algo que no podía ser. La parte de máscaras africanas que hubo en la cabalgata estuvo francamente bien. Un cordial saludo. Gracias por tu visita.
Pues entonces me alegro y espero que hayas tenido una buena Navidad de principio a fin.
ResponderEliminarAh! por cierto no me tienes que dar las gracias por la visita, a estas alturas de leernos ;-)
ResponderEliminarPalestinos e israelitas se susutentan en posturas de fanatismo y desde ellas no creo posible el entendimiento, arrastrar toda la historia de contiendas en cada conflicto es un acto irracional, ¿será una cadena inacabable de saldar cuentas por los que otros hicieron y tú y yo no podemos enmendar?.
ResponderEliminarDiálogo y sentido común, no me gusta la idea de terceros, ¿no hemos visto bastante de "buenas intenciones" mediadoras?
Como periodista admiro a quienes permanecen allí mostrando el horror de lo que sucede, no sería capaz de tomar fotografías como esas, que despiertan a la conciencia social, aunque en los últimos tiempos hay demasiada evidencia de la ineficacia de las protestas pacíficas y no abogo por la guerra, pero cada día veo que sólo desde posiciones de poder se puede remediar algo y las multitudes cada vez podemos menos.
Lastimoso todo esto y peor ver que no se vislumbra solución alguna.
Suscribo de pe a pa cuanto dices/escribes sobre el conflicto de Oriente Medio: la prepotencia israelí, la subsistencia palestina, la presión árabe, la connivencia estadounidense, las tibias reacciones de casi todos... Certero, muy certero análisis, amigo mío. En esta ocasión -como aquella otra vez- tampoco entiendo nada...
ResponderEliminarDe otro lado, -esta vez, sí- entiendo también las anotaciones que establecéis Antonio y tú sobre Euskadi en vuestros análisis. Dos realidades, dos mundos diferentes, dos cruces de caminos... ¡dos soluciones muy difíciles!
Escepticismo, sí; dolor, mucho dolor; sangre y muerte, sobre todo.
Mis pensamientos también estuvieron en Gaza mientras veía el desfile de la cabalgata de Reyes. Y también me sentí acosada del estruendo de las máquinas limpiadoras que perseguían el cortejo dejando el menor número de huellas posibles del evento... Caras blancas pintadas de negro que miran a otro lado si ven un rostro de ese color auténtico... toneladas de caramelos en el suelo sin ser posible ser recogidos...alfombra de publicidad envuelta de azúcar de las entidades bancarias...¿quién dijo crisis?
ResponderEliminarY las caras de los niños, y detrás de sus rostros la de los otros niños, castigados por un pueblo sin piedad. Dicen que en un alto porcentaje las víctimas se convierten en verdugos de otros más debiles. ¿Por qué nadie dice holocausto palestino? Esa es mi pregunta.
Soy un poeta de La Rioja y me gustaria invitarte a leer mi poema Los niños de la guerra que espero no que te guste sino que te remueva que ya lo estarás.
ResponderEliminarUn saludo
No tengo palabras para lo que está sucediendo en Gaza. De verdad que es algo que me toca hondamente y me llena de horror. Cuando veo los noticieros me siento impotente. Nadie hace nada. La brutalidad humana ha llegado a un punto en el que yo misma quisiera metamorfosearme, ser otra cosa y no esto.
ResponderEliminarEsta navidad me ha sabido muy mal, Joselu. Tengo un costado del corazón de luto.
Es uno de esos conflictos del que unos se acostumbra a oír hablar, y ante cada nuevo suceso, movemos la cabeza y chasquemos la lengua dejando escapar un "esto no tiene remedio". Desgraciadamente poco han hecho ambas partes en los últimos años para que se mantenga algo de esperanza. Soy muy pesimista al respecto, pero no creo que vayamos a ver el final del túnel en muchos años.
ResponderEliminarLa imagen es tremenda, insoportable si la miramos bien. Una desgracia que tendría una fácil solución, si hubiera algo de entendimiento y tolerancia entre ambos pueblos. Y en este caso el más fuerte es quizás el más equivocado en su forma de actuar.
Un saludo