En mi
instituto hubo un proceso apresurado de adopción de un programa impulsado por
el Departament d'Educació en que se dotaba a los
alumnos de un portátil, sufragado con fondos
estatales en un cincuenta por ciento. Esto era un total de 150 euros. Este
ordenador suplía a los libros de papel que solían valer unos trescientos
euros. Los libros digitales, vendidos como paquetes de todas las asignaturas,
eran notablemente más baratos.
El
resultado que he visto en el segundo año de implantación de la enseñanza digital ha sido
decepcionante. Las editoriales digitales funcionan muy mal, y ello supone que
muchos alumnos no tienen conexión adecuada porque no funciona
su contraseña o porque no funciona el sistema. Los libros digitales, cuando funcionan, se los ve hechos con premura y sin suficiente consistencia. A ello se une la lentitud
de las conexiones wifi, la manipulación de los ordenadores por parte
de los alumnos que terminan averiándolos, sea porque introducen
programas que no son soportables por los portátiles, sea porque se bajan películas o porque los modifican en contra de las indicaciones
de la casa de fabricación. Otra causa es la rotura de la pantalla por
caída lo que está bastante extendido. Las empresas que los han vendido no
saben o no contestan ante las numerosas averías que van surgiendo.
Además las herramientas tecnológicas con una conexión lenta y en un entorno que está censurado bien sea por insuficiencia de la red o realmente
por el cercenamiento institucional de acceso a páginas potencialmente peligrosas, hacen harto proceloso el
acceso a una aplicación de forma generalizada.
La
impericia de los chavales es también otro factor determinante. Se
suele creer que los nativos digitales son muy hábiles con la informática y no es necesariamente cierto. En ciertos contextos
son unos figuras, pero la realidad en el aula revela una torpeza muy
mayoritaria en programas educativos cuyas dificultades no saben resolver y el
profesor se enreda intentando aclarar sus problemas concretos. Eso unido a que
muchas veces traen el ordenador descargado de batería porque no recuerdan hacerlo en casa.
Una clase
programada con herramientas digitales en la realidad es de una pobreza
asombrosa y el resultado es de una productividad bajísima, casi uno tiene la impresión de que se está perdiendo el tiempo.
El
problema es que nos hemos acogido a este programa que ya no defiende siquiera el
Departament d'Ensenyament por cambio de partido
gobernante y estamos metidos en un proyecto que vemos que hace agua por todos
lados. No funciona. Una clase en que se presuponga el uso de herramientas
tecnológicas es bastante decepcionante.
Sin
embargo, ha aparecido en esta revolución un instrumento sorprendente
que veo difícilmente reemplazable. Es el
cañón de proyección, unido o no a la pizarra digital. El profesor puede
proyectar en la pantalla materiales didácticos y hacer una clase productiva
e interesante en propuestas ya que está conectado a su propio
ordenador donde puede tener enlazados multitud de recursos y enlaces de todo
tipo.
Podemos
prescindir de los libros y elaborar nuestros propios materiales utilizando
luego el cañón de proyección, pero el uso continuo de ordenadores portátiles en el aula es sumamente distractivo, improductivo y
lleno de casuística que lo hace fracasar en
la práctica. Ha sido un error mayúsculo del que no sé como saldremos porque para
muchos padres ha sido un gasto importante. No veo en la vuelta al libro de
texto una solución, sobre todo por su elevado
precio no apto para economías muy humildes que son las
que dominan en mi centro, y más en una situación de crisis.
Esta es
la impresión que tenemos muchos profesores
de la implantación del programa 1x1. No
funciona. Y lo siento porque yo esperaba mucho de él. El ordenador puede ser un buen instrumento en casa -y a veces en el aula- para
conectarse a internet y utilizarlo como procesador de textos, pero en el aula,
a pesar de la buena voluntad y el entusiasmo con que partimos, es sencillamente
una gran decepción. Casi hay una sensación de alivio para mí y mis alumnos cuando planteo clases en que el ordenador no es
necesario. Tengo la impresión, a veces manifestada por
ellos de que han terminado hartos de la experiencia digital, que en poco tiempo se ha llegado a eso que pudiéramos llamar saturación tecnológica.
Hay mucho de frustración cuando uno se vuelva con toda la vocación del mundo en un programa así y descubre que solo ha perdido el tiempo. Y que a nadie le importa.
ResponderEliminarPedro, no discuto la buena voluntad política. La aplicación de la tecnología a todos los niveles parecía una buena opción. Quizás debió haber institutos piloto que experimentaran primero su aplicación antes de la adopción generalizada. El problema es que en los claustros no se debate en absoluto y se soportan todas las inercias oficiales o institucionales sin mayor resistencia. Y es cierto que este fracaso a nadie le importa. Se ha experimentado con los chavales que han servido como conejillos de indias.
ResponderEliminarVaya, pues qué chafón :( Siento que no funcionase, por el gasto y por el tiempo invertidos, claro. Pero no me extraña demasiado que haya sido así.
ResponderEliminarNo sé, yo personalmente no le veo mucho fuste a la educación esta digitalizada. Tuve ocasión en la Universidad de cursar una materia diseñada tal cual en plan experimental. No era lo mismo, pero ya te digo, era un intento. El profe nos explicaba algo mínimo referente a la materia y luego la evaluación era por ordenador mediante tests de respuestas cortas. Una castaña, porque el hombre había desarrollado chorropecientas preguntas pero claro, el programita en cuestión tenía un tope, y al fin, las respuestas a las preguntas iban rulando de unos a otros. Yo pasé de copiarme casi te diría que por pura pereza, porque la materia dada tal cual, a caballo entre una cosa y otra, me pareció un poco rollera, así que obtuve un siete o algo así. Cuando me preguntaban y decía mi nota siempre había quien respondía ¡¿sólo un siete?! Y te digo que si me hubiesen puesto un dos, me habría conformado, porque ni me esforcé, ni aprendí prácticamente nada. Cuatro créditos y medio pagados para nada. Le reconozco el mérito al profe, que al menos lo intentó en su día, porque el programa lo había desarrollado él de modo íntegro, pero ya te digo... fatal.
Lo que sí era muy útil es lo que tú mencionas. El cañón a mí personalmente, me parece casi casi hasta imprescindible. En la Uni los tuvimos en las aulas a partir del segundo o el tercer año después de empezar yo, igual por eso se me hacen necesarios, no sé. En el instituto donde caí, por suerte, en las aulas no tenían pero en el laboratorio de Ciencias Naturales, sí. Así que todas las semanas llevaba un día a los chicos allí. Para hacer alguna práctica, enseñarles muestras de algo, o simplemente para explicarle cosas con el cañón de proyección. No sé en otras materias porque no las conozco como para eso, pero en Biología y Geología, si utilizas imágenes y animaciones es mucho más sencillo comprender los conceptos. Yo utilizaba estas cosas cuando estudiaba para los exámenes de la Universidad, y las he seguido utilizando después para las oposiciones, pero no me digas tú, si no es más fácil por ejemplo, comprender cómo es la estructura de la hemoglobina si ves un modelo en 3D, o entender el mecanismo de acción de la insulina si lo ves animado. Yo lo utilizaba porque ya te digo, a mí me es útil estudiar algunas cosas de esa forma y pensé que para ellos también resultaría más fácil la comprensión. Pareció ser que sí. O esa es la impresión que a mí me dio. El libro si te digo, lo tenía un poco dejado. Seguía más o menos lo que decía, pero no todo. Más que nada porque siempre estaba el despistao de turno que no era capaz de ni de descargarse los apuntes que les pasaba desde casa, ni de prestar demasiada atención cuando estaba en clase, así que para que no pudiesen toserme, si querían estudiar, con el libro podían aprobar perfectamente. No sacar un diez, eso también te lo digo. No sé, yo pienso que lo idóneo es el término medio, aprovechar un poco todo, pero no monopolizar en el 1.0 o en el 2.0, porque todo tiene tantas ventajas como inconvenientes. Y si todo es digital, como si todo no lo es, pierdes la riqueza de unos recursos y otros. Es lo que me parece a mí. Y por supuesto, nada como un buen profesor delante, pero ese es otro tema.
Besetes, Joselu.
Joselu: muy interesante tu post. Por aquí están entregando computadoras(ordenadores) a todos los alumnos en forma gratuita. Desde lo personal e intuitivamente - no soy educadora - me parecía que los resultados serían lo que estás describiendo, pensé que sería un prejuicio mio, pero veo por mis hijos, que la p.c. tal como describís es una excelente herramienta pero hay que tener la suficiente formación para utilizarla de modo provechoso. Parece estar colocándose el carro delante del caballo: lo que debería una herramienta de y para el conocimiento pasa a ser el objetivo del mismo ya que es complejo alejar a los chicos de la cantidad de distracciones que propone la web y tener y usar la computadora es un objetivo para ellos, con lo que el placer de aprender y enseñar con un maestro pierde lugar.
ResponderEliminarMe cuesta salirme de la paranoia pero es a la vez la herramienta más útil y la que más estupidización genera mal utilizada....será que hay que domesticar a las masas¿?
Un abrazo.
Desde mi remota realidad como docente argentina, coincido contigo plenamente, y te felicito por tus reflexiones y tu blog.
ResponderEliminarNo todo lo tecnológico ha de ser garantía de éxito en el aula. Creo que los docentes deberemos seguir preguntándonos las mismas preguntas que siempre han sido pertinentes:
"¿Cómo?" y "¿Para qué?"
En mi país ha habido una iniciativa gubernamental de regalarle a cada alumno de escuela media pública (es decir, la que todos mantenemos a través de nuestros impuestos), una netbook, como si ésto fuese el pasaporte al éxito educativo, cuando hay cuestiones de fondo, esas que tienen que ver con las respuestas a las preguntas que es menester preguntarnos siempre que traemos algo al aula o asignamos un trabajo fuera de ella, que no nos estamos formulando siquiera.
Tienes razón con respecto al cañón de proyección: me parece una herramienta fabulosa, siempre que se entrene a los profesores y se los convierta en "inmigrantes digitales instruidos", ya que, al menos por estos lares, impera el miedo a la tecnología en general, justamente porque tiende a fallar cuando quieres dar la clase magistral en base a ella, por problemas que abundan como conexiones lentas, equipos en
mal estado por mal uso o falta de mantenimiento e invesión, etc.
Es así como la mayoría de los docentes la vamos de informatizados y posmodernos, a través de consignas totalmente abiertas y carentes de criterio pedagógico sensato, y de ahí, peligrosas, como por ejemplo: "Busquen de tarea información en Internet sobre la madera".
Así planteado, los alumnos pueden terminar en cualquier sitio, expuestos a cualquier tipo y grosor de contenido. A menos que el docente indague, antes de asignar la búsqueda al alumno, qué sitios proporcionan el tipo de información que permitirá el aprendizaje esperado,y plantée la búsqueda acotada a sitios valiosos y útiles, con links explicitados, el mero hecho de hacer la búsqueda en Internet no enriquece en lo más mínimo, y puede terminar empobreciendo y dañando a los educandos. Yo misma el otro día me topé con una imágenes bien chocantes al realizar una inocente búsqueda sobre una clase de literatura que quería enriquecer desde la red...
En mi blog he publicado un cuento (aquí les llamamos "cuentos" a los chistes largos y costumbristas), acerca de cómo puede complicarse un novato para algo que en realidad sólo requiere de lo simple para ser efectivo, como sucede en la vida misma. Aplica también para experimentados que quieren innovar, y si te interesa, te invito a mi pequeño espacio de reflexión a compartirlo y compartir la sonrisa:
http://fernanda-abocadejarro.blogspot.com/2011/08/otra-para-docentes.html#links
¡Te saluda desde Buenos Aires, Argentina, otra profe de secundaria!
El profesor llegó más tarde a la alfabetización digital que sus alumnos, y cuando llegó, los jóvenes la usaban solo para comunicarse y divertirse. El profesor, sin embargo, pretende que sus pupiulos asocien ordenador con aprendizaje, con lección, y el pacto no funciona sin sangrar un poco el carácter y la voluntad de la soldadesca, Joselu.
ResponderEliminarVamos a tener que esperar unos años a que profesores y alumnos estén felizmente instalados en el universo digital, desde la cuna.
V., nos faltaba experiencia sobre cómo utilizar la cultura digital. El año pasado empecé con un afán tecnológico extremo. Me di cuenta de que los trabajos que presentaban los alumnos por correo electrónico estaban más descuidados que los hechos a mano, y además son muy difíciles de corregir para que ellos vean sus errores. Desistí y desde la segunda evaluación les hacía presentar sus trabajos de forma analógica. El pretender dar las clases fundamentalmente con el ordenador nos lleva, a pesar de su atractivo, a problemas insolubles. La cultura digital puede descubrir muchos mediterráneos. Hay que utilizarla, claro que sí. Ellos tienen su ordenador. Yo me comunico con ellos a través del correo, de google Docs, pero la dinámica de la clase cada vez me inclina hacia el formato pizarra digital, explicación y apuntes. Se fija la atención escribiendo. Las herramientas interactivas, además de que fallan en muchas ocasiones, son una fuente de continua distracción.
ResponderEliminarPero hemos de aprender. Lo malo es que en los claustros se evita cualquier tipo de debate en aras de un pragmatismo abrumador. Pero cabría hablar del uso de la tecnología, del uso razonable y sensato de la tecnología.
Ana, tened cuidado con la introducción masiva de la tecnología. Son años de pérdida del norte y de desorientación porque implica un nuevo concepto de enseñanza que no es fácil de asimilar aunque uno sea adicto a las nuevas herramientas. El profesor corre el peligro de perderse queriendo cambiar todo. Mis alumnos se quejan porque aseguran que no aprenden nada así, y algunos reclaman la vuelta a los libros de texto. Esto ha sido una sorpresa para los profesore tecnoadictos. Al menos para mí. Los que no han cometido estos errores son los más aferrados a la enseñanza tradicional. Los revolucionarios hemos tenido que avanzar, aprender en la práctica y retroceder. Espero que nuestros alumnos no se pierdan entre tanta experimentación. Ese es el problema. La tecnología no resuelve todo y plantea nuevos problemas. Lo malo es que España es un país extraño y las experiencias de unos no nos sirven a otros. Así estamos siempre empezando.
ResponderEliminarUn abrazo.
Fer, veo por Ana y por ti que en Argentina estáis en un proceso análogo al nuestro, y ciertamente el uso de una computadora (netbook) no resuelve el problema central del qué y para qué. Con tantas innovaciones continuas en el campo educativo, los profesores hemos perdido en buena manera los criterios para discernir lo importante y lo secundario. Los políticos quieren éxitos, estadísticas favorables... y se apuntan a lo más novedoso aunque no esté avalado por la experiencia. En nuestro caso, te puedo decir que observo que la mayoría de los profesores que aplican este programa son escépticos lo que podría asociarse a que no fueran especialmente hábiles con la tecnología... pero tengo la impresión de que los más tecnologizados (en algún sentido yo) estamos advirtiendo, si no nos cerramos los ojos, de los límites de esta experiencia. Ha sido positiva, pero tras un años o dos de enseñanza digital se termina añorando la tradicional. Es un aprendizaje lleno de obstáculos, avances y retrocesos.
ResponderEliminarUn abrazo.
¡Gracias, Joselu!
ResponderEliminarGracias por hacerme el honor de tu visita en mi jarrito, en la tierra donde mis abuelos españoles decidieron desembarcar un día para añorar su España natal hasta la muerte. Allí vivo, así, tal cuál tú pintas nuestro paradigma político y educativo.
Sigo creyendo que la tiza puede hacer milagros... Tal vez peco de dinosauria en esto,aunque me atrae la tecnología, y creo que tiene potencial, si se piensa en cómo incorporarla, más que en el festín demagógico. Y sí, es un gran distractor, la gran oferta de opciones disponibles hace que no se pueda ir tan profundo, nos hace más volátiles, mas promiscuos, si se quiere, en términos cognoscitivos.
De hecho, ahora mismo, mi ordenador y mi pasión por el mundo blogger me están distrayendo de hacer las correciones de los trabajos de mis alumnos para mis clases del día...
¡Gracias por incluir mi blog en tu lista, y gracias por tu reto superlativo!
¡Un cálido saludo!
Joselu, realmente es decepcionante comprobar cómo algo novedoso y en principio útil para estimular la curiosidad de los alumnos queda en agua de borrajas por razones varias, achacables a distintos estamentos, incluidos los propios chavales. Ya sabes que soy bastante escéptica en estas cuestiones. Una pantalla iluminada no es la panacea, soluciona algunos problemas pero crea otros. Creo que todavía estamos en los inicios de esta nueva era, y no sé si llegaré a ver su pleno desarrollo. Sigo prefiriendo el libro al ordenador para leer, y la pizarra digital o el ordenador no ayuda a la concentración. Los chavales se dejan llevar por la rapidez que parece inseparable de la electrónica y siguen sin saber interpretar lo que leen, se lo pongas como se lo pongas. No lo veo claro, la verdad. Y encima supone un gasto nada desdeñable. Mis alumnos completan sin apenas problemas listas de palabras con B, V o lo que sea, pero cuando deben escribirlas con posterioridad siguen cometiendo muchos errores. Qué decepción, qué sensación de fracaso... Quizá otro día lo vea con más optimismo.
ResponderEliminarUn fuerte abarzo, colega.
Entiendo que te sientas defraudado con los resultados. Te llevo siguiendo un montón de tiempo y sé la ilusión que pones en todo lo referente a tus alumnos. Sólo te escribo estas letras para darte ánimos y decirte que con ese cañon que no se bien que es, espero que llegues a cumplir tus metas. Lola
ResponderEliminarEs que me da la impresión de que en este país, empezamos todo por arriba en lugar de hacerlo al revés. Justo esta tarde lo comentaba con una compi de mi clase de inglés, que está en segundo de derecho. Según su opinión, el plan Bolonia se va al garete porque es un desastre. Muy buenas intenciones por parte de algunos, pero tremendos líos y nefasta organización. Y es que a ver, no puedes reformar los estudios universitarios diciendo: hale, ahora os tenéis que tragar esto porque es lo que se acomoda más a lo que hay en el resto de Europa. Así, sin más. Imagina los profes de Universidad que llevan años y años y años, dando clases magistrales. Tenía yo a más de uno y de dos, que no los veo en el plan, ¿eh? Pues esto es un poco lo mismo en parte. En lugar de formar en condiciones primero a los que deben adaptarse, y a los que van a cambiarlo -o no- realmente, no, lo sueltas y ahí se las compongan. Y luego vienes y me dices que no sé qué informe dice yoqueséquécosa y que la culpa es sólo mía, que no hago bien las cosas ¡joé, pero si no os da tiempo! Ô.Ô Si la sensación es que llega todo así a lo bestia, y ya te apañes!
ResponderEliminarNo sé, chico, pero yo eso de ensayo a presión y error por hostión, es algo que no entiendo. Pero debo ser yo.
Joselu, comparto absolutamente tu impresión.
ResponderEliminarEn Aragón se repartieron tablets como la solución a cualquier mal, y mi experiencia directa u observada en otros compañeros dice que se ha quedado como un recurso para utilizar en momentos muy puntuales de la semana.
Conexiones extremadamente lentas que pueden tirar por tierra el trabajo previsto para toda una clase, reparaciones difíciles de gestionar desde el centro, recambios de componentes dificultoso, etc. Muchos más problemas que beneficios.
Un saludo.
Según te leía JOSELU,
ResponderEliminarrecordaba mi gran sueño de estudiante, que era tener un ordenador para no tener que escribir y así evitarme hacer mi infinita siembra de faltas ortográficas:-) Bien, ahora me doy cuenta tras leerte, hubiera sido mucho peor. Teniendo en cuenta mi incapacidad, tirando a nulidad absoluta en el manejo de la informática ( cosa que entonces desconocía :-) hubiera necesitado ayuda cada segundo ¡¡vamos!! te toco yo de alumna y terminas tirándome por la ventana de pura desesperación:-)
Como no se nada del tema, si me permites, te voy a contra una tontería al hilo de este asunto, para que te rías... verás, con el uso de las nuevas tecnologías y la infinidad de aparatos último modelo, sepas o no usarlos y sean o no práctico para el trabajo que pretendes desempeñar, me viene a la mente lo sucedido en un pueblecito de Asturias, Cangas de Onís. Unas Navidades les tocó la lotería...¡¡una barbaridad de millones!! todos agricultores, ganaderos de dos vaquitas y mineros... en cuanto cobraron el premio, los vecinos saliendo todos en estampida a comprarse flamantes Mercedes, daba igual si tenían o no carnet de conducir, daba igual si necesitaban el coche o no, el caso es que todos los de Cangas pusieron un Mercedes en su vida esperando incrementar con ellos su felicidad doméstica, su autoestima y consideración social... Al cabo de los años era una risa verlos, algunos tenían el Mercedes en la bodega todo lleno de achiperres y trastos, en el jardín cuajado de macetas o en el mejor de los casos, sacándolo una vez a la semana del garaje para ir de casa, a misa;-)
Me temo que tal cual cuentas, en breve en vuestras aulas os pasará igual...
Los experimentos están bien como tu dices, a pequeña escala. Usando centros piloto para probar la eficacia de la novedad, antes de implantarla de forma mayoritaria... pero en este país, a veces somos más de pueblo que las amapolas;-)
Un besito JOSELU y no te desanimes, siempre podéis usar el ordenador, para apoyar el folio y tomar apuntes sobre él:-)
Buenas noches, desde le país de los gnomos:))
Llevo más de 10 años utilizando ordenadores en clase y creo que el fracaso de las TIC en el aula tal como está planteado era previsible.
ResponderEliminarComo ya sabes , soy coordinador TAC de mi centro.
ResponderEliminarHe participado en seminarios de formación y he estado en institutos que fucnionan perfectamente en el 1x1 (El IES Calamot de Gavà por ejemplo) Pero...
En aquellos centros que he visto quefuncionaban perfectamente en 1x1, he observado lo siguiente:
1. Son centros piloto. Tienen una Xarxa Heura potenciada y hecha a medida.
2. Tienen un técnico del GEPSE residente, es decir a jornada completa y diaria.
3. Tienen ciclos formativos de Informática, con lo cual tienen un número infinito de apoyos de alumnos y profesores.
4. Tienen plataforma educativa propia. ( e intranet potente) todo ello debido a la gran dedicación el coordinador del proyecto.
5. El ccordinador del proyecto tiene una gran reducción de horas lectivas, realiza horas extras (¡y se las pagan!) Rxpreso mi sorpresa porque yo realizao una gran cantidad de horas extras por profesionalidad y no me las pagan.
Tiene, por tanto, un sueldo que ya quisieramos muchos.
6. Los profesores han relaizado un esfuerzo titánico de elaboración de materiales propios durante...¡cuatro años!
Enfín, lo de siempre, la LOGSE funcionó a la perfección en centros piloto con profesores excelentemente pagados, con medios, con formación en horario escolar y con alumnos seleccionados.
De ahí pasó a deducirse que la ley era ampliable a centros estándard,
es decir a centros con salrios normales, sin formación, con pocos medios y alumnado heterógeneo.
Lo mismo ha sucedido con el 1x1. De la experiencia de centros piloto en condiciones exclusivas y exceptionales ha pasado a deducirse que es ampliable a todos los centros que se quieran acoger.
Sin formación, sin material, sin medios, a toda prisa...
Para ejemplificarlo más claro. Ha sidos como el aeropuerto de Ciudad Real, o el AVE a Extremadura.
Proyectos hechos con los pies sin estudio previos de necesidades y funcionamiento posterior.
Y ahora voy a tu útima conclusión: el uso del cañón proyector con o sin PDI.
Para mi es impagable e insustituible ya que doy clases de Inglés y de Informática.
Elaboro materiales propios pero...a base de horas y más horas en mi casa. No sé si todas las que nos pagan (recordemos que los funcionarios debemos teóricamente trabajar 5 horas y media la semana en casa) pero creo que sí y a vees las supero.
Pero seamos realistas, qué profesor con el sueldo recortado, con una hora lectiva más puesta por el morro. conla tarde libre y la mañana libre sustraída por el morro, con el FAS eliminado por el morro, con la sexta hora eliminada por el morro, conel sueldo congelado por el morro, sin fomación tecnológica suficiente, y con la presión de seguir el libro de texto va acomplicarse la vida en trabajar tanto?
Pues los gilipollas (perdona) como tú y yo. Los maestros vocacionales muchos de ellos con más de 50 años, que no queremos alienarnos ni darnos por vencidos...todavía.
Indudablemente, las nuevas tecnologías son una herramienta prodigiosa... depende de su uso.
ResponderEliminarSi no se usa adecuadamente, tendremos niños embobados que no saben garabetaer dos palabras, en la facultad, por increible que parezca, se da clases leyendo un powerpoint: no utilizándolo como una herramienta de apoyo, sino escribiendo toda la materia en la pantalla y leyéndolo (lo he vivido). En ese caso el profesor sobra. Lo que me pregunto es cómo hay gente que se atreve a entrar en la enseñanza con esa disposición.
Pienso que mención aparte merecen los planes de estudio, los inspectores que si suspendes a alumnos porque no se esfuerzan cargan contra el profesor, vaivenes en cambios de asignaturas e itinerarios y chapuzas de los hijos de puta que nos gobiernan.
Ramón Besonías, es cierto, estamos en el principio de nuestra andadura digital, y estoy contento de la experiencia, pero hemos de reconocer también los problemas que ocasiona. Un mundo exclusivamente digital no creo que sea una buena idea. Pero tenemos que aprender todos.
ResponderEliminarYolanda, lo cierto es que en los últimos años de enseñanza tradicional (libros, pizarra de toda la vida), yo sentía que habíamos llegado al final de un ciclo. Acogí con mucha ilusión las nuevas herramientas digitales, todavía lo hago, pero eso es una cosa y otra no darse cuenta de que a veces se valoran trivialidades tecnológicas como si fueran grandes logros, sólo por el único hecho de estar en un formato digital. Yo valoro las herramientas, pero he tenido que retroceder y volver a retomar la escuela de siempre. Apuntes, notas, copia, escritura, explicación… Seguimos aprendiendo, no obstante. Un abrazo, colega.
Lola, gracias por estar ahí.
ResponderEliminarKikiricabra, no sabía que se habían introducido las tabletas en Aragón. Lógicamente hay que dotarlas de un teclado. Como bien dices, se han quedado como un recurso más en el aula y no como la gran panacea que se auguraba. No suponen en la práctica una nueva dimensión en el hecho de aprender-enseñar por los problemas prácticos que conlleva, que no son fácilmente obviables. Yo hago escribir a mis alumnos con bolígrafo. Necesitan esa práctica, y la de la copia de enunciados, realización de resúmenes, etc.
María, me gustaría saber qué experiencia tienen otros países avanzados en el tema de la introducción de la tecnología en las aulas. ¿Qué hacen en Alemania, en Finlandia, en Inglaterra, en Francia…? Tengo la impresión, que no se si es avalada por la realidad, de que hemos querido alcanzar la modernidad última en un territorio que cambia constantemente. Me gustaría conocer otras pedagogías más consistentes. Un beso.
Anónimo, me he quedado con ganas de conocer más a fondo tu opinión. Tengo la impresión de que sabes de qué hablas. ¿A qué te refieres? ¿A la premura con que se ha hecho? Yo llevo unos seis años introduciendo la cultura digital en las aulas y he tenido buenas experiencias. En pocos años hemos pasado de unos toques digitales que eran estimulantes, a una total saturación tecnológica. Los gobiernos utilizan la educación como laboratorio experimental en lugar de lograr pactos de legislatura con futuros y posibles nuevos gobernantes. Cambia el partido y cambia toda la filosofía educativa. Ahora nos quedamos en terreno de nadie, ¿Puedes concretar más? Un cordial saludo.
ResponderEliminarJosep Fábrega, en nuestro centro no hay ningún asesoramiento ni estímulo personal o profesional. Las Tic andan en un terreno de nadie. Cada uno hace lo que puede, lo que sabe o lo que le dejan. No hay criterios, no hay discusiones, no hay debates sobre su aplicabilidad. No hay nada. Sólo profesores que hacen o no hacen a su entender sin ningún estímulo ni agradecimiento a su tarea. Es como percibir una tarea a la que le faltara un conductor, alguien que supiera más, alguien con quien hablar o debatir. No hay nada. Creo que es un fracaso en toda la regla. No basta con poner wifi en las clases, tiene que haber una filosofía compartida detrás, o al menos un atisbo de diálogo o de enriquecimiento mutuo. Yo estoy contento porque lo que hago lo hago con ilusión, pero la experiencia no está funcionando, por lo que digo y por lo que no digo. Una cosa son los centros piloto, como bien dices, con profesorado motivado y bien pagado y otra es la realidad con que nos encontramos en un centro de barrio con importantes limitaciones de todo tipo.
ResponderEliminarYo estoy utilizando las NNTT en un curso con adultos y lo más fino que dicen es "pero... acaso estamos en un curso de informática". No solo hay saturación sino también aversión.
ResponderEliminarEs tremendo que se realicen planes sin una correcta viabilidad. En fin, creo que así es en todo el estado. Aun así creo que es lo adecuado trabajar con metodología acorde a los tiempos, a pesar de las dificultades. Es un cambio de paradigma y estamos en fase de transito.
Un saludo:
GRK
Creo que la clave está en la transparencia de las TIC, es decir, si todavía contamos con que los ordenadores son más un obstáculo que una herramienta. Si a estas alturas seguimos teniendo problemas de conectividad, de no disponer de recursos digitales (¡con la cantidad de repositorios en red!), es que vamos mal. Siempre me gusta comparar con las lavadoras, por ejemplo: uno no puede ir a la lavadora preguntándose si hoy funcionará o no, porque acabará volviendo al lavado a mano; eso no significa que lo bueno sea lavar a mano, sino simplemente que la lavadora o su servicio técnico son inapropiados.
ResponderEliminarYo estoy abierto a todo lo que viene. No descarto nada. Y procuro utilizar todo lo que está en mis manos para mejorar mis recursos didácticos (que siempre son mejorables). Pero me he encontrado con algo que no me esperaba. Y es que cuando de ordenadores o TICs se trata veo que hay que ser un experto en ello para poder vencerlos y servirse de ello. A mí, lo confieso, me han vencido más de una vez con el consiguiente fracaso metodológico.
ResponderEliminarEn mi instituto tenemos ordenadores pequeñitos portátiles para los alumnos. Y yo los he utilizado profusamente. Pero este año, hasta la fecha aún no lo he hecho. Y no lo he hecho por problemas ajenos a las TICs. Y es que yo doy clase en un edificio anejo a donde se guardan los odenadores, y no puedo acarrear los treinta oredenadores (porque es que somos treinta en clase) yo solo. Tengo que pedir ayuda. Y esto supone un tiempo que me resta a mis escasos cincuenta minutos de clase. No. No quiero los ordenadores. Después está el uso que los alumnos hacen de internet. Tienes que estar ojo avizor porque en cuanto de descuidas, ya están donde no deberían estar. Total, que este año he optado por no traer los ordenadores a clase. Otra cosa es el cañón. Esto si que me es útil para algunos vídeos y para gráficos y fotografías. Pero yo soy un fiel seguidor de la pizarra clásica de tiza y de los libros de texto. Llámame antiguo si quieres, pero es donde mejor me desenvuelvo...
Un abrazo.
Me temo que mi experiencia es completamente opuesta. Pero vamos... completamente.
ResponderEliminarY supongo que se debe a que abordo este tema, de las tIC en el aula, desde otro punto de vista. Ni mejor ni peor. Otro.
Mi enfoque es convertir al alumnado en la editorial. Y no de contenidos, sino de su pensamiento, de su aprendizaje. Y es que cuando les damos secuencias de ideas, ¿qué les queda sino repetirlas, qué otra cosa pueden hacer? Mi enfoque ha sido que conozcan la realidad, que la procesen en toda su complejidad: que realicen las conexiones oportunas entre los conceptos; y entre los conceptos y contextos en los que estos sean relevantes. Y, finalmente, que ese pensamiento en red lo comuniquen.
Yo no actúo como el que produce los materiales, sino como el que dinamiza su creación por parte del alumnado y el que genera espacios de evaluación, coevaluación y autoevaluación.
Y, sinceramente, nos está yendo muy bien. Pero requiere otro enfoque distinto, en el que el currículum pasa a ser una herramienta y no un objetivo.
Eso sí, respeto profundamente cualquier otro enfoque. ¿Discrepar? Absolutamente y con argumentos. Pero respeto absoluto también. Porque no hay una única manera de ser docente.
Eso sí, estoy viendo en este post algunas afirmaciones categóricas, creo (disculpadme si las entendí mal...; y no digo todas las frases, digo algunas). Creo que habría que ser prudente. Hay profesorado y alumnado a los que nos está yendo muy, muy, muy bien. Avalados por el reconocimiento de las familias. En ese sentido, esas algunas frases deberían estar formuladas, creo, en términos de "a mí...". Porque no a todo el mundo le está yendo de igual manera. A pesar de los problemas de conectividad (recomiendo kiwix, p.ej.).
Y es que, en la propuesta docente que yo hago a mi alumnado y a sus familias, las tIC son vitales. No detecto en ellos saturación alguna, sino un crecimiento brutal.
José Luis Castillo,
ResponderEliminarMe gustaría saber en que nivel educativo trabajas(primaria, secundaria, bachillerato). Tambien en qué sector (público o privado).
Y de qué te encargas concretamente.
Si te parece bien. Tengo curiosidad y en tu blog no lo he sabido ver claro.
¡Vaya con los experimentos del Departament d'Educació! Redactad un informe y que os solucionen la situación caótica en la que os han metido o que peguen carpetazo al proyecto y regalen al alumnado libreta, lápiz y surtido de contenidos curriculares en formato papel.Que no haya alfabetización audiovisual y digital desde los primeros cursos de escolarización impide a nuestros alumnos poder aprender y deconstruir las pantallas. Si además añadimos el aprendizaje fragmentado que les llega cuando acceden a lo virtual, no me extraña que prefieran una docencia centralizada, segura, sin sorpresas ni averías pero también ineficaz y descontextualizada...Lavaremos a mano y a máquina como propone Toni Solano, cocinaremos a fuego lento y en el microondas, nos desplazaremos a pie, en bici o en coche...pero empezando sin duda, por aprender a lavar, conducir o cocinar solos y con nuestro alumnado...Y quien proponga algo experimental, que parta de un diagnóstico previo, realice un buen seguimiento y evaluación de lo que haya implantado o que se dedique a otra cosa.Que ya nos tiene la administración educativa bastante mareados como para utilizarnos a docentes y discentes como conejillos de aula.Polémico pero interesantísimo post Joselu, Un abrazo, Mila.
ResponderEliminarJosé Luis Castillo, con el debido respeto, el currículum no puede "pasar de ser un objetivo a una herramienta" porque ni es una cosa ni puede ser la otra. Simplemente es lo que tú y yo debemos encargarnos de concretar en el trabajo diario con los alumnos (y en él se explicitan elementos como objetivos, contenidos, propuestas metodológicas, etc.)
ResponderEliminarPor otra parte, en tus palabras veo representadas buena parte de las ideas que Luri engloba en la denominada pedagogía New Age. Yo no creo que los alumnos deban producir los materiales y ser los que dirijan el proceso. Es este punto donde más coincido con las críticas a esta pedagogía: no creo que el papel del profesor sea el de dinamizar las creaciones de nadie. De hecho, legalmente nos pagan por hacer algo bien distinto.
Un saludo.
Gorka, tengo la impresión de que hemos mitificado el papel de la tecnología. Es como el islamismo. Sólo cayendo totalmente en él se puede superar. Pienso en Irán tan fundamentalista pero que está engendrando una mentalidad laica o crítica considerable. Así nos ha pasado en nuestro centro. El curso pasado se implementó el programa 1x1 y los ordenadores invadieron las aulas. Creo que hice un uso creativo de ellos. Sigo intentándolo, pero percibo un cansancio y una demanda de vuelta a patrones más tradicionales por parte de los mismos alumnos. Es en esta línea donde me muevo. No me importa si lo que hacemos es de última generación, sino el qué hay dentro. Me interesa como profesor de lengua que lean, que se expresen, que escriban, que debatan, que sean críticos con el sistema… e introduzco temas motivadores. A veces utilizamos la tecnología, como herramienta, pero no pienso que deba ser la cosa en sí. Se puede trabajar muy dignamente con un papel y un lápiz. De hecho las más grandes ideas han partido de esos dos sencillos elementos. La tecnología no añade nada que no esté ya en ellos. Es divertida, pero lo esencial es para qué y no ella misma.
ResponderEliminarUn saludo.
Antonio, no sé si la comparación con la lavadora es muy apropiada. La clave es distinguir si la tecnología es el fin en sí mismo o esta es un instrumento para algo. Los tecnoadictos (entre los que me incluyo aunque sea solo por el número de horas que me paso ante un ordenador) tendemos a mitificar este instrumento. Y sí, es valioso, pero es más valioso todavía formar ciudadanos críticos, hombres curiosos ante el mundo que están viviendo, abiertos… Fortalecer ese fondo analítico y crítico es el eje de lo que pretendo hacer. ¿Que la tecnología sirve? Pues utilicémosla, pero sin pensar que es ella la clave. No por escribir a máquina se produjeron obras mejores o más bellas que las que fueron escritas a mano. Cambió el instrumento pero el alma, lo que está detrás, es independiente de una herramienta u otra. Y es eso lo que me interesa. Y por supuesto entiendo que la tecnología es un instrumento esencial en el mundo que estamos viviendo.
ResponderEliminarY, Antonio, ese mantenimiento de los equipos, ese funcionamiento de la red, esas contradicciones que llevan a capar el acceso a muchas páginas, la negligencia o la curiosidad de los alumnos acerca de sus ordenadores… todo eso es el pan nuestro de cada día, y surgen problemas que convierten las clases basadas en la tecnología en algo altamente incierto. He tenido sonoros fracasos y pérdidas de horas intentando poner en funcionamiento nuevas aplicaciones que no han terminado de funcionar aquí y ahora.
Un saludo.
Miguel, veo que son sistema distintos. Por lo que dices, en tu comunidad son los centros los propietarios de los ordenadores, mientras que aquí son los alumnos los que deben conservar y tener el ordenador que compran. Si no, no entiendo que no sean los mismos alumnos los que se lleven su propio ordenador a clase.
ResponderEliminarDa igual, Miguel, un buen profesor utiliza las herramientas según su arte. Se puede ser un excelente profesor sin ser aficionado a la tecnología, y se puede ser también siendo un crack con la misma. Del mismo modo, se puede ser un mal docente con y sin tecnología. La tecnología es una herramienta para acceder más fácilmente al conocimiento, pero ese es el objetivo.
Saludos.
En respuesta a la pregunta que me hacía Josep Fábrega
ResponderEliminarSoy profesor de la escuela pública. De secundaria. Llevo 24 años como docente funcionario (tuve suerte, aprobé a la primera). Este año imparto 2ºESO, 2ºBachillerato y 1ºBachillerato. Los grupos los tengo a 28-30 alumnos en la ESO y a 36 en Bachillerato ordinario. En el bachillerato de adultos tengo muchos menos (unos 15 en 1º y 6 en 2º). Así que este curso tengo horario partido, de mañana y noche. El año pasado daba 1ºESO (30-31 alumnos), 2ºESO (26) y 3º ESO Diversificación (16, lo cual es una barbaridad, la verdad...). Imparto materias del área de Ciencias Naturales. Y el ámbito científico cuando doy diversificación.
La metodología que empleo la desarrollé en ausencia de tIC en el centro anterior al que estoy en la actualidad (en el que llevo cinco años). Allí teníamos un 35-40% de inmigración. Y tenía que trabajar con múltiples niveles en el aula. Allí estuve 11 años estupendos.
En mi actual centro, hay condiciones más favorables al aprendizaje en el alumnado. Y me ha sorprendido gratamente que los métodos que se desarrollan para situaciones complicadas van mejor aún, mucho mejor, en situaciones menos complicadas. Cuando llegaron las tIC fue un alivio porque todo lo que hacía se convirtió, de pronto, en más fácil. Las tIC me permiten desarrollar una educación personalizada en entornos de colaboración.
Y bueno... Cualquier otra cosa que necesitéis saber, a vuestra disposición. :)
José Luis Castillo, mis alumnos son muchachos inmigrantes que tienen dificultades esenciales con el idioma, apenas pueden formular alguna idea, y todo en medio de un entramado de errores fonéticos y ortográficos de primer orden. Me gusta mi trabajo, he elegido esos niveles porque me motivan humanamente. Pero yo soy el profesor, soy el que debo llevarles a conocer la lengua, a corregir su lectura, ampliar su vocabulario, a facilitar su expresión y además fomentar su pensamiento crítico (al que se deje o lo necesite). Creo que soy el que debe proporcionar los materiales. Ellos no los pueden descubrir si yo no soy quien les oriente dónde y cómo deben buscar… Es una tarea importantísima. He de sabe adónde quiero llegar para intentar que me acompañen.
ResponderEliminarLo que me queda claro es que tu alumnado es muy diferente al mío. Y tus circunstancias muy alejadas de las mías.
Un cordial saludo y gracias por participar.
En respuesta a Joselu.
ResponderEliminarEn realidad son muy distintos de mi alumnado actual, pero, por lo que comentas, muy similares a mi alumnado del centro anterior, en el que estuve 11 años. A mí también me motiva mucho ese tipo de tarea. De hecho, siempre que puedo elijo niveles de diversificación o de 1ºESO, que me aportan esa sensación agradable de ser útil. Y mi sorpresa ha sido que sí que encuentran, sí. El problema es atravesar el desierto de la espera. Que dura meses. Y lo que sucede es que tenemos evaluaciones trimestrales. Es raro poner en marcha dinámicas de aula que no den fruto en tres meses. Es lo que hice. Hacer una apuesta por un proceso largo. Y que tener que poner unas notas no me condicionara. Mi experiencia con el alumnado como "editorial de su pensamiento", avalada por las familias, es que hay que esperar e insistir para que arranquen, para que conviertan las ideas sueltas en pensamiento complejo y para que usen la comunicación más allá del nivel funcional, alcanzando los niveles instrumental o, incluso, epistémico.
De hecho, mi objetivo es combinar ser profe de ciencias con ser (informalmente, claro) profe de lengua (al menos de comunicación).
Pero esa ha sido mi experiencia, que supongo que no es trasladable a otras circunstancias.
Suerte con el trabajo! :)
Cordialmente, discrepo de lo que estáis comentando que está pasando con la Escuela 2.0. No es mi experiencia ni es lo que conozco en mi realidad circundante. No pongo en duda lo que afirmáis -por favor- pero estoy más cerca de lo que ha expuesto José Luis Castillo en sus intervenciones.
ResponderEliminarAcepto las críticas a la pésima conectividad que tenemos en este país, pero las demás no creo que sean ni generales ni generalizables. Creo firmemente que el camino emprendido con y por la filosofía 2.0 está resultando más positivo que negativo; que la web 2.0 nos está proporcionando estrategias y valores muy válidos para una escuela moderna.
No quiero extenderme demasiado, pero sí quisiera concluir con unas palabras de Jordi Adell, con las que me identifico plenamente: "La música no está dentro del piano, la música la hace el pianista; sustituye piano por TIC y pianista por docente..."
Desde América Latina, Argentina en nuestro caso, estamos comenzando con estas experiencias y tenemos poco trabajado. No sé cómo se llevó a cabo en tu zona, pero aquí los alumnos tienen las notebooks antes de que los docentes estén bien capacitados. Conozco experiencias muy tristes y otras bastante buenas. ¿Cómo fue la capacitación? ¿El profesorado ha hecho el cambio?
ResponderEliminarPublicaremos una pequeña reseña y un enlace a esta entrada para enriquecer el debate. Gracias por tu artículo.
Dije hace tiempo que en la enseñanza había dos herramientas revolucionarias: el papel y el lápiz, y aunque me acusen de misoneísta, me reafirmo en la idea, y en la práctica cconsecuente. Yo enseño a leer y a escribir, también, ya puestos, a pensar y a saber expresar y expresarse, objetiva y subjetivamente. La información descanonificada que uno encuentra en la red requiere de una preparación intelectual mínima que no sé si todos los alumnos la tienen. En mi caso, un centro con el 95% de inmigración (un auténtuco gueto, creado complacientemente por el sistema educatiivo catalán, para que los hijos de las clases medias no sufran ese "contagio") es obvio que no disponen de ella. Y enseñar a leer, esto es, a comprender, es un esfuerzo titánico que, en muchas ocasiones, en demasiadas, requiere incluso una atención individualizada, sentarse con el alumno al lado y hacerle ver lo que, en el parcial anonimato del aula, es incapaz de entender. Damos por supuesto que la competencia lectora se adquiere cuando se descifran las grafías, y así nos luce el pelo...
ResponderEliminarSigo con el papel y el lápiz, con paciencia, con tenacidad, con esperanza, y sin desdeñar en absolut algunos ejercicios "en red" que me ayudan a conseguir mi objetivo, por supuesto.
Después de leer el artículo de Joselu y los treintaitantos comentarios que le siguen, no puedo menos de admirarme y felicitaros a todos por el nivel de reflexión que tenéis.Me parece que eso es lo verdaderamente importante. Creo que la enseñanza es una actividad estratégica, y eso exige una continua evaluación de todo lo que la compone, para ir modificándola sin cesar, sabiendo por qué y para qué. Sinceramente, vaya mi felicitación. Yo estoy ya en "la reserva", por eso no voy a entrar en el tema que os ocupa, sería una gilipollez hacerlo "desde la barrera". Salud(os) amigos y ¡adelante!
ResponderEliminarmsn, creo que el oficio de docente se haya a merced de fortísimas contradicciones que tienen como eje el currículo que pone en cuestión José Luis Castillo diciendo que es una herramienta y no un objetivo. Kikiricabra lo pone en duda diciendo que no es una cosa ni la otra, sino el eje de nuestra docencia diaria que se explícita en objetivos, contenidos, propuestas meteorológicas… Si el profesor quiere soñar tiene que poner en cuestión la dictadura del currículo; si apela a la realidad educativa, le marca una tesitura muy dura y taxativa que puede que no tenga que ver con la realidad de sus alumnos. Para ello están las adaptaciones curriculares.
ResponderEliminarLa tecnología inaugura tal vez otra forma de hacer las cosas, de iluminar zonas de sombra, de vertebrar de modo distinto nuestra docencia… Es lo que Gorka ha llamado un nuevo paradigma emulando a Ken Robinson tal vez.
Se nos pide que seamos audaces, que hagamos vibrar a nuestros alumnos. Se ha llegado a decir que para ser profesor en estos tiempos se ha de ser interesante como persona (glups!), pero a la vez hemos de ser servidores del currículo. Hemos de inaugurar una nueva pedagogía pero en ella tendremos marcados nuestras referencias de modo rígido y legal.
¿Aporta algo realmente al currículo la realización de un esquemático glog? ¿Una grabación de un poema? ¿Convertir en editores a los alumnos de su pensamiento?
Saludos. Y sí, la administración no ayuda.
Marcos Cadenato, tomo tu última idea original de Jordi Adell en que comparas el uso de las tic con la intepretación de un piano.
ResponderEliminarVeo que hay valiosísimos profesionales inmersos en el mundo de las TIC para los que éstas son una especie de revelación, un nuevo paradigma que conlleva un sacerdocio laico… Pasan una buena parte de su vída frente a un ordenador investigando potencialidades, participan en cursos como ponentes, asisten a jornadas de nuevas tecnologías por toda España, quizás escriben en Twitter, participan en Educared, etc. Esto a costa de otras cosas, porque todo no puede ser. La lectura tiene que ser una de las primeras víctimas de esta confesión, la lectura de literatura no de textos breves y noticias o informes.
La inmersión en este mundo implica muchísimas horas que el común de los docentes no está por ello. ¿Esto les hará pianistas mediocres en medio de unos virtuosos que dedican su vida a la interpretación y a los estudios avanzados? Porque para ser pianista genial eso significa renunciar a otros mundos, y esto no se confiesa.
Yo paso multitud de horas frente al ordenador, investigando nuevas herramientas, nuevas potencialidades educativas, pero he de reconocer que cuando se propone que la realización de un glog de glogster es una magnífica experiencia tecnológica que implica potencialidad y creatividad, yo francamente lo dudo.
Hay, no obstante, una profesional ante la que me quito el sombrero, la gorra y todo, que es Lourdes Domènech. Realmente genial. Pero no es común este método, esta realización precisa y fundamentada,
En el terreno tecnológico hay muchos descubrimientos de mediterráneos. Los auténticos virtuosos son muy escasos y su música sólo es apta para los que los admiramos. El profesor medio nunca tendrá esa capacitación genial y ese toque maestro, entre otras cosas porque eso implica muchísimo, pero muchísimo tiempo de vida virtual que se hurta a otras cosas y la primera es la literatura, la segunda puede ser la familia.. y no sigo.
Un cordial saludo.
Muy buenas, Joselu. Siguiendo la respuesta a tu comentario en mi blog, tengo que decir que tienes razón. Pero el problema está en ese "entorno totalmente digitalizado". Las Tic deben estar integradas pero, como decía Aristóteles, "la virtud está en el justo medio". Sustituir un modelo por otro solo comporta, a la larga, el mismo hartazgo de los chavales y la misma desmotivación. En Asturias, un programa similar, Escuela 2.0, está mucho menos desarrollado pero en algunos centros empiezan a prepararse. Este año tengo dos 1º de ESO con ordenadores, cañon... y es una gozada, pero combinamos las clases "analógicas" con las "digitales". Es una forma de motivar y ellos sienten que es un premio usar los ordenadores cuando, realmente, están trabajando la materia. Bueno, es solo una opinión más, pero Aristóteles tiene razón, seguro.
ResponderEliminarUn abrazo.
Estaba leyéndote esta mañana y me estaba riendo… no por tu post si no por la situación en que me encontraba. Una situación similar a la de tus alumnos… hasta el gorro de tanto invento. Nos han cambiado el entorno de Correo, mensajería y demás y es que te quedas así como amodorrado y no ves nada… ¡lo que hace el hábito ¡ Así que además del trabajo he tenido que aprender cómo exportar la libreta de direcciones, los correos… ¿Por qué nunca diseñan las cosas para que no se colapsen?
ResponderEliminarEn respuesta a Joselu.
ResponderEliminarDices que la lectura de literatura tiene que ser una de las primeras víctimas de esta confesión. Y sí, así es: y la familia, y los amigos, y la tele y los paseos y el sueño...
Dices que para ser pianista genial se debe renunciar a otros mundos. Pero ¿quién quiere ser un pianista genial, quién quiere ser el nº 1? Basta con ser un buen pianista, como tantos...
Dices que se propone que la realización de un glog de Glogster es una magnífica experiencia tecnológica. ¿Quién lo propone? Un glog es un excelente póster multimedia, nada más ni nada menos.
Dices que Lourdes Domenech es realmente genial y una magnífica profesional. Y yo añado: absolutamente de acuerdo, y además es un verdadero ejemplo de la filosofía 2.0: compartir, colaborar, aprender y enseñar conjuntamente son verbos que conjuga a la perfección.
Dices que el profesor medio nunca tendrá esa capacitación genial y ese toque maestro. Claro, ni falta que hace, creo que sólo se trata de formar mejores profesionales, como tantos...
Otro saludo cordial.
Juan Poz, ayer estaba haciendo un sencillo ejercicio de formación de palabras por derivación con alumnos de mayoría inmigrante. Tenían que formar con el adjetivo débil (cuyo significado ignoraban. Tuvieron que buscarlo = falto de fuerza o energía) una palabra derivada con el sufijo -idad. Tremendamente sencillo. Debilidad. Pero ¿cómo explicar a estos muchachos lo que significa el sustantivo abstracto "debilidad" y que lo sepan utilizar en un contexto oracional ? Era una tarea enormemente difícil para ellos, dar el paso del adjetivo a la abstracción, y uno entonces, como profesor, se da cuenta de la enorme dificultad de explicar la lengua a muchachos sin unos rudimentos básicos y tal vez de capacidad comprensiva limitada. La explicación a la clase no funciona pues desconectan. Sólo sirve la explicación individual, uno por uno, intentando que puedan comprender algo que, si uno lo piensa, es la grave dificultad de una lengua en ese camino de la abstracción. Sí, Juan Poz, la labor del profesor es artesanal, de nivel de subsistencia. Entonces la labor con papel y lápiz es esencial.
ResponderEliminarDocente 2punto0, el nivel de competencia tecnológica de los profesores es desigual. La sustitución de libros físicos por libros digitales conlleva nuevas dinámicas que genera nuevos problemas. Los alumnos se acostumbran a los ejercicios interactivos (sin ningún riesgo) por ejemplo de ortografía, pero no retienen lo que se deriva de los ejercicios. Entonces el profesor hace copiar los ejercicios del libro en papel y da nuevas explicaciones que tienen que ser copiadas manualmente. Esto me han explicado profesores que utilizan los libros digitales. La interactividad es fácil y atractiva pero no deja poso. No hay cursillos que hablen de esto. Sólo la práctica del docente hace útil o no la aplicación de la escuela 2.0. La introducción de los netbooks genera nuevas dudas no resueltas de cómo gestionar esta nueva herramienta. Y no hay respuestas fáciles.
jaramos.g., gracias por tu intervención. Sin duda, los que estamos en medio de lo toros, tenemos más dudas que certezas. Yo, al menos, es así.
Alberto G., tienes razón que en el punto medio está la virtud,pero no deja de ser problemático cómo se resuelve la aplicación del currículo con medios escuela 2.0. Yo no veo una práctica clara y sí, mantenimiento de dinámicas escuela 1.0 con medios de 2.0. Si nos decantamos por la innovación tecnológica mayoritariamente, se genera una tendencia a la rapidez, a la falta de profundidad, a la copia inmisericorde (copiar y pegar), y termina creándose un hartazgo si el uso de los netbooks es constante. Las dinámicas de escuela es el ejercicio más complejo que existe. Saber cómo enfocar y utilizar los nuevos avances no deja de plantear nuevos interrogantes. Todo es muy bonito en los sueños y en el papel, pero otra cosa es el aula. Ahí, damos en hueso duro. Gracias por tu presencia.
Malo, lo habitual es que constantemente nos estemos habituando a nuevos entornos digitales. Lo que te pasa ahora en el trabajo es un ejemplo de la continua evolución de los programas informáticos. No sirve de nada la costumbre. Hemos de estar cambiado continuamente, y aprendiendo, so pena de quedarnos atrás como inútiles y faltos de capacidad adaptativa. Suerte con el nuevo programa.
ResponderEliminarParece que llego un poco tarde a este interesante debate.
ResponderEliminarEn mi opinión lo que resulta realmente desconcertante es el empeño en utilizar herramientas (a menudo incorrectamente englobadas en las nuevas tecnologías, por cierto) sin objetivo claro. Y sospechoso es que, cuando los aprendizajes acaban por ser más pobres y superficiales, los que promueven el uso a toda costa de las TIC apunten a los profesores que han utilizado "mal" las tecnologías, y a que los objetivos de evaluación tengan que ser modificados, para que se ajusten a aquello que contribuyen esas tecnologías.
Disparo una idea: ¿alguien se ha dado cuenta que los que aprendimos con la metodología tradicional (+ o -,generación Nintendo, para ayudar a la localización) hemos aprendido y aprendemos perfectamente el uso de las tecnologías, además de acceder a niveles cultos de la cultura tradicional? ¿Será posible llevar a cabo el camino a la alta cultura desde la utilización masiva de tecnologías que fomentan la velocidad y no la reflexión?
¿Se han dado cuenta de las dificultades ante los ordenadores de los alumnos que no saben descodificar los mensajes de texto del sistema operativo, software...?
En fin, tengo muchas dudas sobre el modo de conseguir que mis alumnos de Matemáticas lleguen a pensar en abstracciones mientras miran a la pantalla de los ultraportátiles.
Los leo con cierta "alegría", no por el fracaso, no por la nueva frustración, sino porque pensé que estaba loca, que la culpa de "todo" era mía, que en los años de capacitación en NTICs no había aprendido nada...
ResponderEliminarCuando retomé, hace un par de meses, la clase "tradicional" con sólo el cañón y únicamente mi notebook cuando los necesito, volví a creer en lo que estaba haciendo... y los alumnos, también.
Mis saludos cordiales desde Argentina.
Denise
Hola me llamo Sergio (@sesperanto) soy informático y educador, en la actualidad estoy haciendo un Máster en TIC aplicada a la Educación. Me ha gustado mucho este artículo porque defiende algo que siempre he pensado.
ResponderEliminarLas nuevas tecnologías están siendo implantadas en la educación de forma impulsiva, marcada por la presión de esta sociedad del consumismo, que ha visto en la educación una forma de sacarle el máximo provecho ofreciendo productos innecesarios para educar. Pero las aulas cegadas por la nueva necesidad de acercar las nuevas tecnologías a los niños/as, no se plantean si este súbito acercamiento es productivo o perjudicial.
¿Por qué tenemos tanta prisa por acercar las TICs a nuestros hujos/as?¿Por qué dejamos la educación de nuestros alumnos/as en manos de las empresas?
Echadle una ojeada a mi Blog
Mi opinión es diferente. Este rechazo al uso de las nuevas tecnologias me recuerda cuando se empezó a trabajar con los ordenadores y buena parte de los profesores se oponian a utilizarlo por el hecho de que venian a complicarle la existencia. Ante algo desconocido lo más fácil era oponerse. Al final se han visto obligados a utilizarlos pq hay q avanzar. Sé q hay profesores q se oponen porque les supone más trabajo para corregir, mas horas de dedicación. Lo negativo q yo he encontrado es q la conexión a internet es en muchos casos insuficiente y q la administración no se ocupa de mantener los equipos, pero de ahí a demonizar el uso de las nuevas tecnologías creo que hay diferencia. Yo soy profesora d idiomas y he encontrado muchas utilidades para trabajar la expresión escrita,oral yla comprensión: pueden hacer grabaciones, trabajar a partir de videos, escribir e ilustrar cuentos, comunicarse con alumnos extranjeros, realizar trabajos de busqueda de informacion q luego exponen oralmente en clase, realizar vídeos..todo lo cual viene a ser un excelente refuerzo para todo lo que se explica en clase. Creo que es necesario cambiar la forma de trabajar y compaginar lo bueno que puede tener el método tradicional con lo bueno q nos pueden aportar las nuevas tecnologías. Oponerse a todo por sistema, porque nos resulta INCÓMODO creo q no es la solución
ResponderEliminarJuval... la gente que aquí se ha puesto a reflexionar no es tonta, me parece que acusarnos de cómodos y negadores es faltarnos el respeto, mira los post con atención la mayoría llevamos años en esto, y muchos hicimos posgrados o especializaciones. A partir de ese saber y del trabajo en el aula estamos llegando a estas conclusiones, que _en mi caso_ no están cerradas ala cambio y nuevas propuestas.
EliminarMis saludos cordiales,
Un debate interesante y lleno de argumentos por ambas partes. Lo he enlazado en esta entrada del blog "Medios y escuela": http://bit.ly/KFgzNt
ResponderEliminarSaludos cordiales.