Páginas vistas desde Diciembre de 2005




sábado, 30 de agosto de 2008

El regreso


Estos últimos días de agosto me siento como cuando don Quijote estuvo velando sus armas antes de ser investido caballero en la venta que él creía castillo. Me siento ansioso por regresar a mi profesión, la de enseñante, que ha vertebrado mi blog desde hace tres años. El regreso es el tema de la más espléndida aventura jamás contada en La Odisea en la que Ulises vuelve a su casa en Ítaca, arrostrando mil y un peligros. Es una historia que nunca me canso de releer. Y ahora me retorna cuando faltan muy pocas fechas para reencontrarme con mis nuevos alumnos.

La enseñanza es el reino de lo extraño, como la literatura. Me gusta dotar a este blog de una cierta dosis de extrañeza y de cierta oscuridad porque cada vez que inicio un curso es como enfrentarme a lo desconocido; es como iniciar una aventura fascinante y nueva.

Y me gusta contarlo desde dentro, desde la conciencia perpleja de un profesor que intenta explicar su desafío a todo tipo de lectores: a profesores sin duda, a los que atesoro entre mis amigos más directos; pero también deseo que mis reflexiones lleguen a personas ajenas al mundo de la enseñanza. Me siento especialmente estimulado en saber que los pensamientos de este profesor emotivo y secundario pueden ser leídos por lectores de las más variadas edades y condiciones profesionales alejadas de lo estríctamente académico...

Hasta allí, donde estéis, amigos, deseo que mi experiencia particular participe en alguna manera de lo universal, y que mis palabras se llenen de densidad para explicar una historia que es nueva cada año y que implica necesariamente esperanza. Si a ello se pudiera añadir un hálito poético, Profesor en la Secundaria, hincharía sus velas y su nave saldría al mar azul lleno de misterios y gigantes de un solo ojo o insólitas doncellas que me esperarían en su isla lejana.

12 comentarios :

  1. Tal como Ulises regresó a Ítaca cargado de experiencia, así tú vuelves, querido amigo, a mostrarnos el mundo de la enseñanza desde tu experiencia y tu forma de ver su realidad, tan valiosa para quienes somos profanos y para tus colegas profesionales.

    Tu develación no sólo es profesional lo es, sobre todo, humanística. Tú nos enseñas tantas cosas: amor a la profesión, a la literatura, a tus alumnos. Eres un libro abierto lleno de sabiduría y buenas intenciones. Gracias por estar ahí.

    ResponderEliminar
  2. Lo hermoso de esta profesión es que entre más das, más tienes. Es la fuente que mana y es tanto más fuente entre mayor sea el número de personas que sacian su sed en ella.

    ResponderEliminar
  3. pero mas que ulises, luego tu emprendes otro viaje que durara casi nueve meses donde toda tu experiencia sera necesaria para domar las dificultades que te encuentres.

    tengo entendido que este ultimo curso que paso fue bastante bien, te deseo que pases otro parecido.

    por tu parte, intenta concedernos de nuevo, aunque no lo merezcamos, esa vision humanistica de la ensenyanza.
    saludos y gracias

    ResponderEliminar
  4. Me ha encantado leer tus palabras. Espero ansiosa la llegada del nuevo curso, con todas las sorpresas que me esperan y con la ilusión de enfrentarme a lo nuevo. Estreno otra vez colegio, compañeras/os, alumnos, etc... Besos

    ResponderEliminar
  5. Pero no me digas que no molesta eso de madrugar!!! Buenas, buenas.
    Como siempre agradecida por compartir tus pensamientos.
    Me han invitado a un meme al que invito a todos. Es sobre escribir seis cosas sin importancia que te hacen feliz. Me lo pasé bien.
    Un saludo.

    ResponderEliminar
  6. El tema del regreso tiene múltiples interpretaciones literarias, desde el ángel cáido hasta el héroe triunfante. Quizá la profesión -nuestra profesión- sea una lucha entre ambas fuerzas en busca del equilibrio.

    Buen regreso

    ResponderEliminar
  7. Prefiero esa imagen marinera a la del gladiador a punto de que le suelten los leones ;-)
    Ánimo.

    ResponderEliminar
  8. Yo también me llamo Antonio pero no soy el de antes. Tengo algo que ver con tu profesión.
    Ánimo.

    P.S. Añado tu blog a los que leo.

    ResponderEliminar
  9. El regreso implica un viaje y un viaje parece implicar un crecimiento, una cierta educación sentimental. Ya sea héroe o ángel caído, lo más importante es conservar, a pesar de ese aprendizaje y de esa madurez adquirida, esa curiosidad, esa extrañeza de la que hablas.
    Que te enfrentes a un curso nuevo «como a una aventura nueva y fascinante, como a lo desconocido», que lo compares con la literatura es tan esperanzador y tan genial que supongo que es lo que hace que lleguemos aquí lectores que, aun interesados en el mundo educativo, y mucho, no somos profesores.
    Desde luego, tu nave sí llega a mares llenos de misterios; y tu perplejidad y tu curiosidad son un tesoro a la hora de ofrecernos tus experiencias, Joselu.
    P.S.: tampoco mi hija pequeña se engancha a la lectura, solo la mayor. Tiempo al tiempo porque cada vez creo más que no hay trucos, aunque yo pruebo algunos: dejar algún libro del que hablamos la mayor y yo a su alcance, no enfrentar nunca leer con ninguna otra forma de ocio... Gracias por tu comentario.
    Un beso.

    ResponderEliminar
  10. Me alegra saberte de vuelta y con ganas de lanzarte a las trincheras, a cazar molinos de viento, a sacar conejos de la chistera y a crear historias nuevas.

    Me alegra sentirte con ganas de escribir de nuevo, de llenar el blog, no con cualquier cosa sino con la experiencia, que junto con la paciencia dicen que es la madre de todas las ciencias.

    Me quedé sin el camino de las flechas, pero estuve andando por otros que por carecer de indicaciones aún me parecieron más motivantes, igualmente reveladores y llenos de aprendizajes. Creo que la esencia de todo es comprender que nunca se termina de aprender, algo en lo que tú nos das lecciones magistrales dignas de ser escuchadas y que cautivan como los buenos cuentos. Caminante se hace camino al andar, ha llegado el momento de levantarse, coger los bártulos necesarios y decir ¡vamos!

    Un abrazo enorme, arrierito, nos esperan nuevos retos y nuevas sensaciones.

    ResponderEliminar
  11. Cuando escribiste el post al terminar el ciclo, yo sabía que ibas a volver... Al blog y a las aulas.

    Maestro, querido maestro, es tanto lo que nos trasmites con tus palabras, que por eso te seguimos... tú te sientes como un Quijote, yo ahora me siento como un Sancho en espera de lo que este loco maravilloso lo quiera llevar a vivir.

    Qué curiosa comparación has hecho! El Quijote y Ulises, ambos míticos, ambos luchadores, con motivos y motores diferentes; uno loco y otro cuerdo... Así como suelen ser las personalidades de los docentes, quienes sin duda tienen ya ganado un buen lugar en el olimpo.

    Un beso
    Lucero

    ResponderEliminar
  12. Anda, déjame que me embarque de "polizona"...
    Este año, maestro, toca aprender de los peques... Iremos compartiendo...
    Yo ya voy notando cierta humedad en la punta de los pies...
    Gracias y un abrazo

    ResponderEliminar

Comentar en un blog es un arte en que se recrea un punto de vista razonado, emocionalmente potente.

Selección de entradas en el blog